El próximo viernes a Gonzalo Juan Ferragut (Eivissa, 1955) le tocará defender en un pleno extraordinario los primeros presupuestos del Consell d’Eivissa que elabora. Prejubilado del sector bancario, Juan se ha buscado un ‘hobby’ que cada día le apasiona más. Asegura estar «encantado de la vida» como conseller d’Economia i Hisenda y defiende el aumento en la partida de personal para el año que viene.

— ¿No son muchos 28 millones de euros en personal cada año?
— No son ni muchos ni pocos. Para ti y para mí 28 millones son muchos pero para repartir entre 650 personas considero que es lo que toca. Es lo que hace falta.

— ¿Y 650 personas trabajando en el Consell no son muchas?
— No. Todo depende de lo que el Consell queremos que haga. Si queremos que dé servicio y se ocupe de la isla, no son muchos. Ahora bien, si lo que queremos es que el Consell tenga menos capacidad de actuación y que en vez de hacer el Consell lo haga la empresa privada, pues son muchos.

— En 2016 se pasará de 26 a 28 millones de euros el gasto en personal. De este aumento, 800.000 euros son para contratar a 19 personas en el departamento de Turisme. ¿Por qué son necesarias estas personas?
— A nuestro parecer, cuando se traspasó al Consell la competencia en turismo se hizo con pocos recursos económicos y sin personal para llevarla. ¿Cómo llegamos a que son 19, 15 o 25? El departamento de personal y de turismo son los que lo han detectado. El personal hace falta en esta casa. De hecho, para cobrar las sanciones hace falta gente que trabaje.

— ¿Hace falta este coordinador de Mobilitat que costará 38.000 euros anuales?
— Sí. Se pone el marcha el Consorci de Mobilitat, que estaba parado. La movilidad en Eivissa ya vemos cómo está; habrá que trabajar duro. La consellera de Mobilitat, Pepa Marí, lo ha visto necesario y también era uno de los pactos de gobierno a los que llegamos en su día.

— ¿La plaza ya está también pactada? Porque en un principio se dijo que sería para el concejal de Guanyem en Sant Joan, Gianandrea di Terlizzi.
— No, a mí no me consta que oficialmente esté nombrada. Será una plaza que nombrará el grupo Podem-Guanyem en la que nosotros no tenemos nada que decir. Será una persona preparada para ello y con inquietudes en el tema.

— ¿Cómo se justifica destinar medio millón de euros a medidas de radicalidad democrática? ¿Tanto cuesta la transparencia?
— Sí, hay mucha cosa a hacer. Ahora estamos retransmitiendo los plenos por internet y queremos que se abran las ventanas. No había nada hecho y ésto sólo es un presupuesto, no quiere decir que se gaste toda esta cantidad pero es la que se ha considerado oportuna.

— Para dejarlo claro de una vez: ¿cuánto dinero de más se paga en cargos políticos –consellers, directores insulares y otros cargos de confianza– en relación a lo que pagaba el anterior equipo de gobierno?
— En cifras redondas, todo lo que son políticos y cargos de confianza, está alrededor de 300.000 euros. Hemos contratado directores insulares porque creemos que nos hacen falta para nuestras políticas, no nos escondemos y estamos muy orgullosos de ellos. Nos hacen falta para lo que queremos hacer. Y también creemos que la oposición es un elemento imprescindible para el buen gobierno y hemos pasado de dos plazas que había antes de dedicación exclusiva a cuatro plazas. Estoy totalmente de acuerdo con que se haya aumentado esta cantidad.

— ¿Cuánto nos cuesta de más la oposición?
— Ayer [por el pasado jueves] dije 80.000 euros, pero hoy me desdigo y son 51.102 euros, un 49% más.

— El presupuesto ha pasado de 81 a 87,5 millones de euros. ¿Este aumento es en buena parte por la nueva ley de financiación de los Consells?
— Una parte sí que se debe a esto pero otra es que del convenio de carreteras nos tenían que soltar casi 5 millones. El Govern, por ley, también nos tiene que financiar las competencias que no nos son propias para después quedárselas, principalmente la residencia de Cas Serres. Nos tienen que dar el 60% del coste de la residencia, de las plazas médicas, que está alrededor de los 4 millones.

— ¿Cuánto cuesta anualmente la residencia de Cas Serres?
— Aproximadamente unos siete millones de euros.

— De los ingresos previstos, ¿están todos asegurados?
— Sí, tenemos derecho a que nos lo paguen. Y si no lo hacen nos pelearemos por ello. Hemos quitado las ‘bestretes’ [anticipos a cuenta de la ley de financiación] porque sabemos que los tres millones que nos tocan no nos los van a pagar. Pero más que los ingresos me preocupa su ejecución. Por lo que he visto, en los últimos años mucha parte no se ha ejecutado.

— ¿Se sabe cuánto se ha ejecutado del presupuesto de este año?
— Las obligaciones netas reconocidas a 31 de octubre son 52 millones de euros ante un presupuesto inicial de 81 millones que, junto con las ‘bestretes’ aprobadas en su día aumentaba hasta 135 millones. Tenemos de batallar todo lo que hacemos pero también su ejecución. No podemos decir que tenemos un presupuesto de 135 millones y que al final de año nos gastemos sólo 60.

— ¿Habrá dinero este año para empezar a arreglar la carretera de Santa Eulària?
— Habrá dinero pero para empezar las obras vendrá justo porque hay mucha cosa que hacer. También queremos que el proyecto que se haga tenga el máximo consenso, pero esto no debe retrasar las obras. Por lo que nos ha dicho la consellera de Mobilitat, Pepa Marí, vendrá justo empezar las obras de la carretera en 2016, pero espero que sea que sí.

— ¿Cuánto dinero debe el Consell d’Eivissa a los bancos?
— Muy poco, debemos un millón y poco, que no se cancela porque las comisiones de cancelación son más caras que dejar que se amortice el préstamo. Tenemos capacidad crediticia, no tenemos intención de pedir ahora ningún préstamos pero tampoco nos dará miedo si a lo largo de la legislatura se tiene que pedir dinero. Tenemos las manos libres.

— ¿A cuántos días se les paga a los proveedores?
— En el último informe se pagaba a 18 días. Cuando el proveedor nos trae la factura, tenemos 30 días para darle el visto bueno. Una vez que se le da el ‘OK’, tenemos 30 días más para pagarla. Estos 18 días pertenecen a este segundo plazo. Una de prioridades es bajar estos plazos. No sé si lo conseguiré pero no podemos tener gente que lo pase mal porque las instituciones no le pagan cuando toca. Hoy [por el pasado viernes] hemos llevado a pleno una serie de facturas por valor de 40.000 euros del año 2012. Esto no lo podemos permitir. Una persona que ha hecho un trabajo, tiene que cobrar y no tenerlo a dos velas.

— Cuando hay un cambio de gobierno, los nuevos siempre dicen que se encuentran las cuentas hechas un desastre. ¿Ha sido este su caso?
— Yo nunca lo he dicho. La institución está bien pero he encontrado un Consell que se ha dedicado a meter dinero en el banco y a no gastar en vez de trabajar por la gente y la isla. Si no gastas no das servicios y es en momentos de crisis cuando a la gente le hace falta apoyo de las instituciones. A nosotros no nos ha pasado como el Govern, nos hemos encontrado las cuentas bien. Demasiado bien. No me gusta hablar de los anteriores equipos de gobierno ni de los que vendrá, pero me hubiera gustado encontrar las cuentas peor y que la gente estuviera mejor.

— Antes hablaba de las ‘bestretes’, que según sus cuentas nos deben 12 millones de euros. ¿Cree que el Govern pagará antes de que acabe esta legislatura?
— Sí, al menos forzaremos para que así sea. Hoy también lo hemos pedido y también lo habíamos hablado con la consellera d’Economia i Hisenda, Catalina Cladera, para que durante el primer trimestre de 2016 establezcamos un calendario de pagos. Es un dinero que los ciudadanos de Eivissa tienen que recibir cuando el Govern tenga posibilidad de pagar.

— ¿Cómo lleva trabajar en el sector público? ¿Cambiaría algo de su funcionamiento?
— Cada día vengo a trabajar con una ilusión mayor. No sé si es posible pero todavía no me he acostumbrado a la velocidad del sector público. Si pudiera la cambiaría.