La construcción del edificio en el lugar que ocupa la antigua estación marítima es el principal escollo de una reforma del puerto que ya debe de haber comenzado. Foto: DANIEL ESPINOSA

«Ojalá pudieran hacer marcha atrás, pero me temo que será muy difícil». Con estas palabras, Joan Ribas, segundo teniente alcalde de Ribas y miembro de Guanyem, matizaba las palabras del alcalde, Rafael Ruiz, acerca de la reforma del puerto de Vila y, en concreto, sobre la petición que el ayuntamiento de la ciudad ha hecho a Autoritat Portuària de Balears (APB) para que el futuro edificio de es Martell que sustituirá a la antigua estación marítima tenga unas dimensiones más reducidas que el que está inicialmente proyectado.

Proyecto licitado

Ribas recordó que la reforma del puerto ya está licitada y que incluye la construcción de un edicifio de 600 metros cuadrados, por lo que será complicado «cambiar las reglas a mitad de partido».

A pesar de ello, insistió en que el edificio ocuparía el mismo espacio en la plaza que el actual «o incluso un poco menos» pero que solo tendría una planta, por lo que «el impacto no tendría nada que ver con lo que tenemos ahora».

También recordó que APB se ha comprometido a firmar un acuerdo para prohibir que al edificio se le dé usos comerciales «independientemente de que cambie el color político» y no se puedan abrir en el futuro comercios que puedan hacer competencia a los que ya hay en el puerto. «Con este compromiso, la amenaza desaparece», recalcó Joan Ribas acerca de este aspecto.

La asamblea decidirá

La próxima asamblea de Guanyem para tratar esta cuestión no tiene todavía fijada una fecha pero se celebrará previsiblemente después de Navidades para estudiar la documentación que ha entregado Autoritat Portuària, valorar su posición acerca del proyecto y adoptar después «una decisión informada». En la última asamblea, los miembros de la formación acordaron no dar apoyo al proyecto y abstenerse en la votación del proyecto en el pleno del ayuntamiento aunque, según Ribas, la posición de Guanyem podría cambiar «después de tener más información y todos los elementos para poder juzgar».

El segundo teniente de alcalde dijo estar «casi convencido» de que el Partito Popular, después de hacer sus aportaciones, se sumará finalmente al proyecto. «Durante las elecciones había que atacar de alguna manera pero nosotros sabíamos desde el primer día que estaban de acuerdo», señaló Ribas respecto a la posición inicial del PP en contra del proyecto. «Son cosas de la política», concluyó.

EL APUNTE

Valorar la viabilidad de un parking soterrado

Guanyem ha pedido informes técnicos para valorar la viabilidad de construir un aparcamiento soterrado en la avenida de Santa Eulària antes de dar su apoyo a este proyecto.

No obstante, Joan Ribas cree que, independientemente de que sea totalmente subterráneo o semisoterrado, el aparcamiento es «imprescindible».

«Al parking de es Pratet le quedan uno o dos años de concesión y la gente que viene en verano no tendría ningún lugar para aparcar», subrayó.