La Unidad de Tráficos y Laborales de Policlínica Nuestra Señora del Rosario es una unidad multidisciplinar en la que se ofrece «un servicio completo y personalizado» a pacientes que han sufrido un accidente y que trabaja para diagnosticar y tratar «de manera rápida y eficaz cualquier tipo de lesión», apuntan desde la Policlínica.

La Unidad de Tráficos y Laborales cuenta con el apoyo del servicio de Urgencias de la Policlínica, disponible las 24 horas del día durante todos los días del año. Ante una complicación o dolor posterior al accidente, los profesionales de Urgencias atienden cualquier necesidad del paciente.

Otros servicios del hospital en los que se apoya la Unidad de Tráficos y Laborales son la Unidad de Cuidados Intensivos, Hospitalización, Pruebas diagnósticas, así como todas las especialidades médicas, como Traumatología, Neurocirugía, Cirugía general o Fisioterapia y Rehabilitación. La agilidad en los procesos «es máxima, no sólo en casos urgentes», por lo que se evitan los tiempos de espera y se acelera la recuperación del paciente.

Los tres centros de fisioterapia y rehabilitación que el Grupo Policlínica tiene en Ibiza, cuentan con más de 30 profesionales en formación constante, muy acostumbrados a tratar a pacientes que necesitan recuperarse tras un accidente. Además, el equipamiento de vanguardia hace que sea ésta sea una de las especialidades más agradecidas para los pacientes accidentados, «porque constatan que la recuperación posterior es realmente rápida y eficiente».

En casos de cirugías, desde el primer momento del post-operatorio la rehabilitación comienza ya dentro del hospital con fisioterapeutas especializados en las cómodas habitaciones del centro, con asistencia las 24 horas y acceso a servicios VIP.

Ibiza cuenta, a día de hoy, con 75 hermanos y «lo mejor es que está entrando gente joven, algo que es esencial porque necesitamos relevo generacional», comentó de Alfonso. La realidad estaba presente en la rueda de prensa en un joven de 23 años que es masón e hijo de un masón.

Tampoco quiso olvidarse de recordar que, aquí, se recaudan alrededor de 6.000 euros anuales destinados a proyectos de caridad, beneficencia y solidaridad. «Ayudar al prójimo es bueno, pero nosotros tenemos que dar formación masónica» explicó el Gran Maestro de La Logia de España quien aseguró estar luchando por integrarse en la sociedad. «La Masonería ha estado cerrada durante años, pero necesitamos salir. No somos un lobby, ni un grupo de presión, ni un partido político, ni un sindicato. Queremos ayudar en beneficio de la sociedad». Así, a la pregunta sobre la situación que se vive en Cataluña la respuesta fue contundente: «no podemos opinar porque es un tema político». Aún así, de Alfonso recalcó que desde la Gran Logia de España se ha hecho una declaración institucional mostrando su preocupación al tiempo que piden recobrar la armonía.

La Masonería en España, al contrario de en otro países Europeos, está creciendo y desde 2010 ha aumentado en un 25%. «Aún así, estando en el 2017 hay masones que lo mantienen en secreto. Hay que salir de ese armario que ya huele a naftalina porque la sociedad nunca nos va a aceptar si nosotros no salimos a ella», concluyó de Alfonso.