Hippy Market de Punta Arabí, el mercadillo más antiguo y más grande de la isla que este año celebra sus 45 años de actividad. Según explicó Thomas Hofmann, responsable del mercadillo, se trata de un sitio «emblemático y auténtico» que destaca por la mezcla que tiene de artesanos veteranos y de nueva generación. «Es algo especial porque se nota la esencia de los primeros, que llevan toda la vida aquí, mezclada con la de los últimos que han llegado», señaló.

Así, el Hippy Market apuesta por la artesanía propia y original, dejando de lado las importaciones y todos aquellos productos que puedan encontrarse en tiendas tradicionales. «Queremos que lo que se venda aquí sea diferente y que esté hecho a mano», matizó Hofmann. De esta manera, en la calle de entrada al mercadillo, conocida como calle de los Artesanos, podemos encontrar a muchos de ellos trabajando en directo; solo tenemos que parar para poder disfrutar de la forma en la que producen sus creaciones exclusivas.

A día de hoy, el mercadillo cuenta con 500 puestos en los meses álgidos del verano y con numerosas solicitudes de aquellos que quieren hacerse un hueco. Quizás lo más representativo sea la gran riqueza cultural que alberga este espacio de es Canar. «En los puestos hay bastantes ibicencos, pero también hay gente de nacionalidades de todo el mundo como, por ejemplo, argentinos, brasileños, italianos o alemanes», dijo Hofmann.

Mercadillo

El Hippy Market de Punta Arabí abrió sus puertas ayer después de cinco meses de descanso. Lo hizo por todo lo alto, con un tiempo espectacular y gran aforo de visitantes. Sin duda, los asistentes tenían ganas de volver a disfrutar de un día completo en el mercado.

Es el caso de Carolina que, acompañada de su pequeño, se acercó a es Canar a media mañana. «Estamos de vacaciones en Ibiza y hemos aprovechado. Ya lo conocíamos, pero ahora se está mejor porque hay menos gente», contó. Lo curioso es que no solo ella quería volver al mercadillo, su hijo de cinco años le insistió.

El hecho de que el mercadillo aúne variedad de puestos de artesanía, música en directo, paradas gastronómicas y una zona infantil hace que tanto turistas como residentes lo tengan como parada obligatoria. «También está bien para pasar un día completo en familia porque con la zona infantil los padres pueden hacer talleres con sus niños, así pueden crear algo y no solo comprar», explicó Hofmann.

A estas actividades se suma la música de los inconfundibles tambores que llevan más de 40 años poniendo ritmo al Hippy Market; motivo que hace que este sitio no pase desapercibido. «Nunca había visto un mercado hippie tan auténtico, tan de verdad. Veo que aquí todo el mundo va por libre y es una maravilla», dijo una turista. «La primera vez que vine a Ibiza fue en el 72, este mercadillo ni existía, y aunque la isla ha cambiado mucho porque está muy edificada, la esencia de aquella Ibiza sigue. Está mejor de lo que me esperaba», añadió otro.

De esta manera, los artesanos se dan por satisfechos por poder ofrecer sus productos de la mejor manera posible a un público que cada vez es más exigente. «Muchos te preguntan cómo confeccionas las alpargatas, si es natural, si lo haces tú o lo mandas hacer... buscan naturalidad», dijo una artesana.

Sin duda, este mercado destaca precisamente por eso, por su naturalidad. Los amantes de este «arte» podrán visitarlo todos los miércoles de 10 a 18 horas hasta mayo y hasta las 19 horas junio, julio, agosto y septiembre.