La línea de concertina tiene, al menos, 300 metros de longitud y está ubicada en un terreno de Sant Francesc de s’Estany. | Toni P.

En el bosque que hay dirección ses Salines, en el camino que sube tras la caseta de ‘Peón Camiero’ y a escasos 100 metros de la carretera, se ha instalado una línea de concertinas que recorre buena parte del perímetro de una finca coronada por una urbanización privada. La presencia de este método disuasorio puede poner en peligro tanto a las aves que frecuentan el Parque Natural como a cualquier excursionista, ya que su altura no va más allá de los dos metros, accesible a cualquier brazo en alto

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El tipo de valla que sujeta la concertina tampoco parece reunir las condiciones cinegéticas obligatorias en zonas naturales protegidas para permitir el paso de la fauna. También se pueden observar focos de iluminación conectados a detectores de movimiento en plena zona boscosa.

La Conselleria de Territori del Consell d’Eivissa está al tanto del caso desde el pasado viernes y durante el día de hoy se pronunciará al respecto. Es presumible que su retirada sea inminente teniendo en cuenta que el Plan Territorial Insular (PTI) prohibe este tipo de instalaciones y que ya hay precedentes que han acabado en la retirada de las concertinas. Y es que en 2017, tal y como publicó entonces Periódico de Ibiza y Formentera, otro particular tuvo la misma idea «para evitar robos» en Porroig, en el mismo municipio de Sant Josep, teniendo que retirarla al poco tiempo.