Celebración de comuniones en una finca de Ibiza.

Mayo y junio, época de comuniones en las parroquias de toda España. Cientos de niños y niñas de Ibiza esperaban con emoción el día de su primera comunión. Un evento que ha incrementado en los últimos años la inversión que dedican las familias. Fotografías, comidas que se tienen que aplazar. Trajes y vestidos que en muchos casos ya estaban comprados. La crisis sanitaria ha obligado a aplazar estos eventos y las familias rezan para que sus hijos no peguen el estirón.

El administrador diocesano de Ibiza y Formentera, Vicent Ribas, explica que esta semana han empezado a celebrar eucaristías con asistencia de fieles con una ocupación del 50 % y con medidas de seguridad. Esto se extiende a todo: bodas, bautizos y comuniones.

«Estamos viendo como evoluciona la situación para poder dar una respuesta a las familias respecto a esto sacramentos. No sabemos si podremos celebrar las comuniones en grupos. En la situación actual es difícil una celebración de primeras comuniones con la solemnidad que requiere. Ahora, ni siquiera tenemos permitida la presencia de un coro», indica.

Considera que es probable que este año las comuniones se celebren en octubre o noviembre, una alternativa que ya barajan en muchas diócesis españolas. Sin embargo, es prudente respecto a dar fechas. «Había muchas familias que lo tenían todo reservado y preguntan de vez en cuando, pero es que todavía no sabemos cuándo se nos permitirá hacerlas. Hay que dialogar en cada parroquia, conocer la realidad y tomar una decisión, pero respetando las medidas sanitarias».

Dice que en general existe aceptación entre los fieles frente a esta situación. «Oficié el funeral de un matrimonio fallecido por COVID-19. Estuvieron conmigo dos personas. Es una situación dura, pero he visto mucha comprensión», relata.

Fotógrafos
Silvia Zorrila es fotógrafa especializada en familias, bebés y comuniones. Se iba a encargar de la comunión de Mar, que tenía previsto celebrar ayer su comunión. La sesión de fotos de precomunión estaba programada para el 17 de marzo. El estado de alarma truncó esta primera toma de contacto entre Silvia y Mar. «Vimos que esto iba para largo y decidimos aplazarlo todo», explica Zorrilla.

Desde marzo, el sector vive una gran incertidumbre debido al parón, a la espera de saber cuando podrán volverse a poner en marcha eventos sociales. «Hay mamás que están empezando a pedir las precomuniones, para aprovechar el vestido que seguramente ya no les valdrá el año que viene», explica.

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En el caso de estas sesiones de fotos previas a la comunión, explica que está dando citas para julio y agosto. «Hay que verlo desde el punto de vista positivo, seguramente se puedan hacer fotos en Cala d’Hort y no esté lleno de yates».

Explica que, en principio, todas las comuniones se celebrarán aunque sea más adelante, por lo que tiene la esperanza de recuperar todos estos eventos aplazados. Le preocupa la acumulación que seguramente se produzca, pero indica que los que más problema tendrán son los fotógrafos que también se dedican a bodas, dado que es posible que se solapen con las comuniones en septiembre. «De todas formas la cuestión es que se celebren. Ante todo hay que ser optimista, simplemente es un paréntesis que nos obliga a aplazar».
Silvia además es una de las afectadas por partida doble, dado que tenía programada su boda para el 30 de mayo. «Cuando vimos como estaba evolucionando todo decidimos aplazar la boda a septiembre».

Aunque esa era la primera idea, finalmente se casará en junio del año que viene, por si acaso. Dice que no le gustaría celebrar su boda con mascarillas, mamparas y restricciones de aforo. «Cuando me case quiero abrazar, besar y estar a gusto con mi familia y amigos», indica.

EL APUNTE

La Diócesis de Ibiza y Formentera se suma a la Jornada por los afectados de COVID-19

La Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal ha propuesto, a todas las diócesis de España, la celebración de una Jornada por los afectados de la pandemia, que tendrá lugar el día 26 de julio, fiesta de San Joaquín y Santa Ana, patronos de los ancianos, ya que son el grupo social más golpeado por la enfermedad, o el día 25, solemnidad de Santiago apóstol, patrón de España.

Esta jornada incluirá la celebración de la eucaristía, ofreciéndola por el eterno descanso de todos los difuntos y el consuelo y esperanza de sus familiares. Al mismo tiempo, está previsto dar gracias por todo el trabajo y el sacrificio realizado por tantas personas durante el tiempo de la pandemia.