El vertido fecal del puerto tras las lluvias del lunes. Foto: MARCELO SASTRE | MARCELO SASTRE

Desde hace tiempo la lluvia es sinónimo de vertidos fecales en el puerto de Vila. Unos vertidos que se espera que se solucionen a partir del 20 de junio, fecha en la que está prevista que se den por finalizada las obras del tanque de tormentas. En los últimos tiempos, esto también en sinónimo de enfrentamiento entre el Ministerio de Transición Ecológica y el Ayuntamiento de Ibiza.

Tras los vertidos del lunes, Periódico de Ibiza y Formentera se puso en contacto con el Ministerio. Estos, al igual que hicieron a mediados de mayo, negaron que tuvieran alguna responsabilidad y le echaron la culpa a Vila. «Los vertidos no tienen su origen en la obra del Ministerio. Cuando se realizó la conexión de pluviales al tanque del puerto se anularon los alivios que existían en la zona de actuación. Desde la conexión de la red de pluviales al tanque de tormentas no se ha producido ningún alivio al puerto, funcionando correctamente tanto la estación de bombeo de aguas residuales como el bombeo de alivio de pluviales», aseguraron.

Insistieron nuevamente en que el problema de los vertidos radica en «la red de saneamiento de la ciudad», siendo responsabilidad del Consistorio. Insistieron que en «numerosos puntos» la red alivia directamente al puerto y que cuando se realizó la conexión a la red de pluviales ya se envió un correo al Ayuntamiento «aconsejándoles anular estos alivios».

Desde Vila reconocen que estos trabajos aún no están terminados. Hasta la fecha se han conectado tres de los cuatro aliviaderos que descargan en el puerto. Las obras para conectar estos aliviaderos con la tubería de la Autoritat Portuària de Balears comenzaron el 28 de mayo y tienen un coste de 12.542 euros. Explicaron que no pudieron comenzar antes porque tenían que esperar que finalizase la obra ministerial. Aunque aquel día se anunció que se tardaría tres días en realizar los trabajos, finalmente no se terminarán hasta la semana que viene. El motivo: las mareas. Desde el Consistorio explicaron ayer que esta semana la marea se encuentra demasiado alta y no permite que se pueda trabajar en el último aliviadero que se está más bajo que el resto. La previsión es que la próxima semana, con la marea más baja, se pueda finalizar.

Funcionamiento del tanque
En cualquier caso, Vila descartó que este sea el «motivo único» por el que se producen los vertidos, negando así la versión del Ministerio. Señalaron que se trata de una «actuación complementaria a la obra de la infraestructura del tanque de tormentas y de sus estaciones de bombeo que, al no estar todavía recepcionadas, no funcionan al 100 %». Del mismo modo, esperan que este problema que persiste desde hace años se solucione una vez que Abaqua recepcione la obra del tanque de tormentas y «toda la actuación esté funcionando a pleno rendimiento».

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Por contra, fuentes ministeriales mantuvieron que tanto el bombeo de pluviales como el de residuales funcionan. Estas aseguraron que durante la tormenta del lunes «el tanque funcionó correctamente en modo automático, entrando en funcionamiento el bombeo de pluviales». Añadieron que «en ningún momento la capacidad de los equipos fue superada por el caudal entrante en el tanque de tormentas por lo que no se produjeron vertidos». Insistieron en que el tanque se encuentra finalizado y que «opera del mismo modo a como lo hará durante la fase de explotación».

No es la primera vez que ambas instituciones tienen cruces de declaraciones. La semana pasada, el alcalde Rafa Ruiz criticó duramente al Gobierno tras haber sido culpados por los retrasos en las obras. Cabe recordar que los trabajos de Adecuación del sistema de saneamiento de la ciudad de Ibiza empezaron en noviembre de 2017, tienen un coste de 6,4 millones de euros y están cofinanciadas por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional FEDER 2014-2020.

El objetivo de esta infraestructura es evitar los vertidos fecales, aunque desde el Ministerio de Transición Ecológica siempre han precisado y recordado que si la red de saneamiento y pluviales del municipio «tiene carencias de capacidad en otros puntos, seguirá habiendo problemas cada vez que se produzca un episodio de lluvias», por lo que podría darse el caso de nuevos vertidos con el tanque de tormentas ya en funcionamiento.

EL APUNTE

Dudas de que con el tanque de tormentas se acaben los vertidos

El vicepresidente de la Federación de Comerciantes de La Marina-Puerto de Ibiza, Joaquín Manuel Senén, lamentó que se volviese a repetir un episodio de vertidos que consideró de los «más fuertes que he visto». Pese a lo molestia por estos restos fecales que inundaron el puerto, Senén reconoció que su mayor preocupación estaba en que los aliviaderos estuvieran tapados y que algo funcionase mal: «Teníamos miedo que como pasó hace unos años nos salieran los vertidos por los váteres de nuestros locales». Además, Senén confesó que cuando se hicieron estos aliviaderos del puerto estuvieron contentos con el Ayuntamiento, porque se crearon precisamente para evitar que las aguas fecales salieran por las plantas bajas de los establecimientos. Ahora, con el paso de los años, espera que se de solución a un problema que se alarga en el tiempo, pero no lo ve claro: «Se están gastando mucho dinero, pero sin resultados. Espero que cuando se haga la depuradora nueva esto se solucione. Pero tengo muchas dudas, no pienso que se vaya a solucionar y cuando llueva seguirá habiendo vertidos».