Muchos ibicencos y algunos de los extranjeros que visitan la isla estos días acudieron ayer a disfrutar del mercadillo. | Marcelo Sastre

La vida sigue a pesar de la pandemia. Ayer, sábado, era día de Mercado Ecológico y Artesano en Sant Josep y el buen tiempo invitaba a recorrer su medio centenar de puestos. Con mascarillas y distancias, cientos de personas visitaron las paradas en las que se podía comprar desde bisutería a cestos, pasando por unas verduras para la comida o unas flores para decorar algún rincón triste y gris.

El Ayuntamiento de Sant Josep puso en marcha este fin de semana una iniciativa para ofrecer más espacio a los peatones, de modo que la visita al mercadillo fuera más agradable y segura, sanitariamente hablando. Es por ello que se ha limitado el paso de vehículos en la calle Pere Escanellas desde el cruce de la carretera de Es Cubells y hasta la salida de la calle Cas Vildo. El objetivo, según informó el Ayuntamiento en un comunicado, es «abrir un amplio espacio libre para el tráfico de peatones en una nueva isla sin coches».

En la jornada de ayer, las personas de toda la isla que acudieron al mercadillo disfrutaron de la música de Amalian Folk. El trío, nacido en Ibiza, fusionó para la concurrencia diferentes estilos. A dos guitarras y con ese toque acústico muy personalizado y sereno, la vocalista, Pilar Muñoz, encandiló a los transeúntes acompañando a la caja flamenca o tocando la darbuka. Su repertorio hizo un recorrido por el folklore de diferentes países, canciones en ibicenco, y temas más populares y conocidos.

En el puesto más colorido del mercado, Linda y Blanca iban atendiendo a la gente que se acercaba a comprar verdura, fruta o incluso flores. Todo ecológico y cuidado con mucho cariño. Pero en los demás puestos no faltaba de nada. Pulseras o lámparas de macramé a las que se han dedicado horas de trabajo artesanal, abanicos o puntos de lectura pintados a mano de una delicadeza excepcional, así como sombreros, fulares, bisutería diversa, cestería o incienso. Una buena alternativa para cualquier sábado, como el deayer, que ayer hizo gala de sus encantos.