Marga Guasch expone sus abstracciones matéricas en Can Portmany

La propia artista nacida en Santa Eulària explicó a Periódico de Ibiza y Formentera que la exposición consta de 15 obras cuyos formatos oscilan entre los 70 por 70 centímetros de las más pequeñas hasta los 120 por 160 centímetros que tienen las más grandes. En ellas ha empleado técnicas mixtas con acrílico sobre lienzo, «con mucho color y textura».

En esta ocasión Guasch ha escogido como temática la naturaleza y las abstracciones del fondo del mar «plasmando los distintos fondos marinos a distintas horas del día y cómo incide la luz del sol en ellos provocando que vayan cambiando de color». De hecho, según sus palabras, busca partir de un elemento figurativo como es el mar para llegar a una obra abstracta. Una idea inspirada en el pintor malagueño Pablo Ruiz Picasso, «quien decía que realmente no existía el arte abstracto al haber siempre una referencia real».

Empezó hace 15 años
Marga Guasch recordó a este periódico que hace unos 15 años empezó a pintar de forma amateur, aunque al principio «le parecía algo pretensioso y le causaba mucho respeto».

Sin embargo, su pasión por la pintura viene «desde siempre» y por ello decidió estudiar Historia del Arte y Restauración de pintura por la Universidad Nacional de Educación a Distancia y posteriormente hacer un Master en Conservación de Patrimonio Histórico por la Universidad Pablo Olavide de Sevilla y un curso de Restauración y tasación de pintura y mueble en Barcelona.

En este sentido, asegura que «sin duda» la pintura y la restauración son dos caras de la misma moneda. Así, en su caso, la restauración le ha aportado «minuciosidad y paciencia» y le ha ayudado a concienciarse sobre la buena conservación de su obra en un futuro y como aplicar productos específicos de conservación utilizados en museos, y destinados a su pervivencia en el tiempo.

Ahora, consagrada en el ambiente artístico de la isla, con varias exposiciones a sus espaldas, la pintora de Santa Eulària aseguró que le interesa «todo tipo de pintura, desde la renacentista italiana hasta la neoclásica francesa y la barroca española, y por supuesto la pintura abstracta».

Es precisamente, en estilo donde mejor se encuentra artísticamente hablando. «Creo que es mucho más visceral, más libre e impulsiva porque refleja más quién eres y cómo te encuentras, y porque es la pintura de nuestra época y del momento en que vivimos».

Investigación y azar

Con respecto a su pintura, Marga Guasch destaca «la importancia del color y la materia, lo que la incluiría dentro de la corriente del neoexpresionismo abstracto».

En este caso asegura son «innumerables» los pintores que la influencian, «desde los fauvistas como Matisse y los expresionistas americanos de la primera época como De Kooning o Milton Resnick, hasta artistas actuales matéricos como Anselm Kiefer, Barceló o Bosco Sodi».

Sin embargo, de todos ellos destaca el segoviano Esteban Vicente, pintor expresionista abstracto y uno de los componentes de la Escuela de Nueva York junto Pollock, Rothko, o el mismo De Kooning. Tanto es así, que Guasch asegura que tomó la decisión de dedicarse profesionalmente a la pintura en una de las salas de su museo en Segovia, ante una exposición retrospectiva de su obra.

Por otro lado, aseguró que su proceso creativo comienza por «la investigación personal» que realiza con la materia y «que tiene mucho de azar y de accidente, lo que condiciona el resultado final». Después, visualiza el resultado final y comienza a pintar «aunque en muchas ocasiones, el proceso va variando mientras va trabajando». Algo que hace que, según explicó, «su obra final sea una sorpresa que puede que no tenga nada que ver con la idea inicial».

Sobre su inspiración Guasch aseguró a este periódico que fundamentalmente son el fondo del mar y el de Ibiza y Formentera en particular, con la referencia de los trabajos que hace Anglada Camarassa. De hecho, no concibe la vida sin sus paseos por la playa en invierno y nadar en verano.