El helicóptero encargado de la fumigación, el domingo en Santa Eulària. | Toni Planells

Durante estos días, por primera vez en Ibiza, se han puesto en marcha actuaciones contra la procesionaria del pino con la aplicación de un tratamiento aéreo. Este tratamiento se aplica sólo a los municipios de Sant Joan y Santa Eulària, los más afectados por la presencia de este insecto.

Tratamiento biológico
El producto fitosanitario que se ha estado aplicando durante estos dos últimos días en el noreste de Ibiza es el mismo que se ha aplicado en Formentera durante los últimos cuatro años: Bacillus thuringiensis variedad kurstaki, un producto de tipo biológico. Se trata de una bacteria que se encuentra de forma natural en el suelo y en las plantas y que sólo puede permanecer unos días sobre las hojas, ya que se degrada rápidamente por efecto de los rayos ultravioleta. No afecta a las abejas y suele ser utilizado en agricultura ecológica.

La decisión de aplicar tratamiento aéreo en Ibiza responde al incremento de bolsas detectadas el último invierno. Aunque se eliminaron todas las que se encontraron este verano, han aumentado los datos de capturas de mariposas de procesionaria en la zona de Santa Eulària y Sant Joan. En 2020 se capturaron un total de 3.658 mariposas con las 1.506 trampas de feromona repartidas por toda la isla. Un 64,57% de las cuales se capturaron en esta zona.

La gran extensión de las superficies de pinar potencialmente afectadas por la procesionaria en la isla de Ibiza (25.088 ha) y la escasa intensidad de los daños que todavía está causando en estas formaciones de bosque autóctono hacen necesaria la adopción de actuaciones de lucha contra esta potencial plaga en masas continuas de pinares en la citada isla.

En este sentido, el conseller de Medio Ambiente y Territorio, Miquel Mir, firmó ayer mismo la resolución por la que se declara un foco incipiente de plaga en la zona noreste de Ibiza.

El tratamiento aéreo no es la única solución que se aplica contra este insecto. En este sentido, Sanidad forestal acaba de adquirir dos nuevos cañones para el tratamiento terrestre de los cuales uno quedará ubicado en las Pitiusas. El tratamiento terrestre, que consiste en hacer dos pasadas en días no consecutivos se aplicará desde mitad de octubre a finales de noviembre.

Murciélagos
El servicio ha reforzado también el control biológico de la procesionaria con la colocación de 30 nuevas cajas refugio para murciélagos. De este modo, se fomenta el incremento de población de uno de los principales depredadores de este insecto. La Consellería ha contado, en este caso, con la colaboración de la Iniciativa de Investigación de la Biodiversidad (IRBio).