Bienvenida sea cualquier ayuda

La primera de ellas fue un taller sobre trámites por incapacidad para personas afectadas por cáncer impartido por Gloria Fuertes, de la Asociación Pitiusa de Ayuda a Afectados de Cáncer (Apaac). En esta conferencia, la experta habló a la decena de personas asistentes de la diferencia entre discapacidad –que se limita a lo físico– e incapacidad –que tiene que ver más con lo legal– y de la manera en que se pueden solicitar las ayudas.

Como en apenas una hora no daba tiempo a mucho, las interesadas –porque eran todas mujeres, menos un hombre que afirmó que había asistido por error– podían pedir cita allí para estudiar su caso más detenidamente en la asociación.

En cualquier caso, las alumnas, casi todas con cáncer de mama, salieron satisfechas. Así, Cristina Gil había sacado en claro que era mejor no precipitarse para pedir la incapacidad, sino que era más conveniente esperar el curso de los acontecimientos. A la colombiana María Cecilia Fajardo, por su parte, la charla le pareció «muy interesante», ya que se le habían aclarado las diferencias entre ambos términos. Ella se mostró «muy agradecida» a Apaac por su ayuda y asesoramiento. Por su parte, Catalina Mariguás también dijo haber obtenido mucha ayuda de la charla, ya que previamente carecía de cualquier tipo de información.

En el segundo taller del día, de asesoramiento oncoestético, la piscooncóloga de Apaac Beatriz Yusta explicó qué cuidados es necesario hacer a la piel por los efectos secundarios de la quimioterapia o la radioterapia. Entre estos, se cuentan los picores, la sequedad o las quemaduras, y también la incomodidad y la caída de pelo.

En este sentido, Yusta detalló cómo combatirlos usando las cremas apropiadas, corrector o polvo de sol. Esta experta recordó que las personas afectadas deben tener en cuenta que estos efectos son habituales en los tratamientos, por lo que se trata de «suavizarlos», porque, cuando uno se encuentra bien físicamente y con una imagen cuidada, se siente mejor y eso, dijo, es «importantísimo».

Además, se realizó una parte eminentemente práctica sobre maquillaje oncológico, para cuando se pierden las cejas o las pestañas. También llevaron pelucas y pañuelos que ayudan a que uno se sienta «lo mejor y lo más identificado posible» con lo que era su imagen anterior para, de esa forma, poder aceptar mejor la nueva.

Una de las asistentes, la rumana Viórica Anushka, fue maquillada en plena clase por la profesora y quedó muy contenta. De hecho, aseguró que los dos cursos le habían «sido de mucha ayuda», porque, además de proporcionarle información, su presencia este sábado en el Ayuntamiento de la localidad le había aportado «mucha alegría y confianza» y le había hecho sentirse «arropada». Anushka –19 años en la isla– sufre de cáncer de cuello uterino y forma parte de APAAC, en cuyas actividades intenta estar «implicada e involucrada».

Fuerza
El tercer taller fue impartido por el fisioterapeuta ibicenco Paco García, quien acudió en representación del Colegio de Fisioterapeutas de Baleares. En este caso, el objetivo era explicar el trabajo de fuerza a los pacientes de cáncer. García recordó que, entre los efectos secundarios que provocan la quimioterapia o la radioterapia, se encuentran la fatiga, las alteraciones cardiovasculares y la pérdida de masa muscular. Para conseguir frenar este desgaste, el fisioterapeuta se remitió a las propuestas de la Sociedad Española de Oncología, que, tras «una revisión muy amplia» de antiguos postulados, propone ahora situar al músculo como «el eje de la recuperación y el bienestar de la persona», tanto antes de comenzar el tratamiento como mientras dura o incluso una vez que se termina.

Básicamente, subrayó, se trata de hacer ejercicios de pesas, si bien dependiendo del tipo de paciente tendrá que emplear una u otra. García afirmó que había que «quitar el miedo» a hacer entrenamientos de pesas durante todo el proceso, ya que ayudan a revertir los efectos secundarios del tratamiento.

«Lejos de lo que se ha estado diciendo, hay que hacer ejercicios, aunque evidentemente algunos tienen que ser supervisados según el tipo de paciente y el estadio del tratamiento», explicó, y recordó que, por ejemplo, puede darse el caso de mujeres que son madres y necesitan coger en brazos a sus hijos.

Al final de la mañana, Eva María García, también con cáncer de mama y que asiste a clase de pilates en Puig d’en Valls con APAAC, aseguró que le habían sido muy útiles los tres cursos. El de fuerza, dijo, para hacer ejercicios en su casa; el de los trámites por incapacidad, para saber qué se puede hacer y qué no; y el de maquillaje, para cuidar su piel, especialmente en su caso, ya que está siguiendo un tratamiento hormonal.

El cáncer en adolescentes
Ya por la tarde, en Can Jeroni, se proyectó el cortometraje Cumplevidas, sobre el cáncer en la adolescencia, y posteriormente hubo una conferencia titulada ‘Adolescencia y cáncer: cuando los cambios se acumulan’. En este sentido, la concejal de Acción Económica, Gobernación y Protección Civil del Ayuntamiento de Sant Josep, Pilar Ribas, resaltó la importancia de estas dos actividades, ya que, si bien casi todo el mundo está concienciado con el cáncer en adultos y el infantil, «la adolescencia se queda en medio y bastante difícil lo tienen ya, porque ni son niños ni adultos».

Multitud de actos desde el viernes hasta este domingo

Además de Apaac, participan en estas jornadas la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), Ibiza y Formentera Contra el Cáncer (IFCC), Aspanob y la Fundación Elena Torres, todas ellas de manera desinteresada. El viernes ya se realizaron un taller de pilates, otro titulado ‘Date una pausa y respira’ y el último, de danzaterapia. Asimismo, se proyectó Maktub. Este domingo concluye el ciclo con varias actividades más. Entre ellas, cabe destacar los Peluqueros Solidarios o un taller que versa sobre ‘El poder antioxidante de la fruta’. A las siete, se celebrará el último acto, un concierto solidario en el auditorio de Caló de s’Oli.