El presidente de la FETTAF en Ibiza, Joan Torres.  | Marcelo Sastre

El Recinto Ferial de Ibiza acogió este viernes la Jornada sobre el Valor de Referencia Catastral, organizada conjuntamente por el Consell d´Eivissa y la Federación Española de Asociaciones Profesionales de Técnicos Tributarios y Asesores Fiscales (FETTAF). El presidente en Ibiza de este colectivo, Joan Torres, destaca que más de 120 personas asistieron al acto en el que se puso de manifiesto el funcionamiento del nuevo valor de referencia catastral y las claves para su correcta tributación. El presidente insular Vicent Marí fue el encargado de cerrar la jornada en la que se celebraron distintas ponencias, como la ofrecida por el director general de la Agencia Estatal de Administración Tributaria, Jesús Gascón, sobre ‘Perspectivas de futuro de la Agencia Tributaria’.

—Usted preside en Ibiza la Federación Española de Técnicos Tributarios y Asesores Fiscales.

—La federación engloba a todas las asociaciones de estos profesionales de distintos ámbitos autonómicos y representa a todas estas entidades de manera estatal.

—En las Pitiusas, ¿estos profesionales detectan problemáticas especiales?

—Sí. Hay diferentes temas, aunque debemos diferenciar entre el profesional y el contribuyente que, al final, somos todos. Como federación, defendemos a nuestros clientes que son los trabajadores de este sector. Aquí es donde siempre pedimos seguridad jurídica para que, cuando asesoremos, sepamos bien aquello que estamos haciendo. Entre nuestros logros, hace unos años se modificó una norma relativa al modelo 347. Éste se debía realizar en enero, cuando en los despachos existe una carga laboral muy grande. Hablando y negociando con la Agencia Tributaria logramos que este trámite se aplazara a febrero. Todo lo que beneficie a los profesionales es el objetivo de la federación.

—Les preocupará esa falta de seguridad jurídica.

—El derecho tributario es muy cambiante y hay muchas normas que provocan muchas resoluciones. Hasta 300.000 al año en los tribunales económicos administrativos. Todo ello provoca mucha inseguridad y algo por lo que luchamos, y que poco a poco vamos logrando, es aumentar esa seguridad jurídica. Ello también nos ayudará en el día a día de nuestro trabajo. Las normas fiscales son tan interpretativas que pueden llevar a error. Así, hay que unificar criterios.

—En la jornada se ha abordado la importancia del nuevo valor de referencia catastral en la compra-venta de inmuebles.

—Ibiza es uno de los lugares donde más transmisiones se producen, tanto en compra-ventas como en herencias. Es un hecho y por ello propusimos al Consell organizar esta iniciativa. El tema del valor de referencia viene del pasado año de la ley antifraude, que señalaba que, a partir del 1 de enero, a pesar del valor reflejado en cualquier escritura, nosotros íbamos a tributar por el valor de referencia catastral. Ello creaba también interpretaciones diversas. Es legal, pero hay que hacer comprender a la ciudadanía que esto puede suceder. Por ejemplo, le han podido dar a un piso un valor de 200.000 euros, aunque después, por su estado, este valor sea mucho inferior. Así, hoy mismo ponemos en vigor un convenio que la federación ha podido pactar con el Catastro para que, si un ciudadano asegura que el valor concedido a un inmueble no es el correcto, se pueda corregir. Es uno de los temas más importantes, que antes de cerrarse una compra-venta o aceptarse una herencia, pueda modificarse este valor.

—¿Cree que los ciudadanos tienen a veces la impresión de que resultan perjudicados con el pago de impuestos al aceptar una herencia o en otras situaciones?

—Por ello, lo mejor es acudir a un asesor fiscal o a un técnico tributario. En Ibiza, por ejemplo, contamos con los pactos sucesorios que son una manera de recibir herencias pagando relativamente poco. Contamos con mecanismos legales y podemos realizar una planificación de todas estas cuestiones. Hay muchas opciones a la hora de heredar y, me atrevería a decir, sin pagar nada en muchas ocasiones. Nuestra intención es ayudar al ciudadano y, si profesionalmente podemos aportar nuestro granito de arena, es importante.