Melania García Colomar este miércoles en Santa Gertrudis rodeada de sus productos artesanales. | Daniel Espinosa

Hace unos años la joven ibicenca Melania García Colomar, cansada de productos que le creaban irritaciones en la piel sin que además le proporcionaran los beneficios que anunciaban, decidió convertir su pasión por la cosmética en una forma de vida. Se puso manos a la obra y aunque le costó, ahora con 34 años puede presumir de tener una firma consolidada con un laboratorio artesanal pionero en Ibiza.

Se llama Mel Ibiza y es una pequeña empresa que oferta jabones, cremas faciales, champús o repelentes para mosquitos elaborados con productos cien por cien naturales. «Siempre he sido una apasionada de este mundo y como siempre he tenido la piel muy sensible y los productos que probaba no solo no me servían sino que me hacían mal un día decidí hacerme emprendedora aprovechando lo que había aprendido de mi madre y unos cursos que realicé tanto en Madrid como en Ibiza y que me abrieron las puertas de un mundo apasionante», explicó este miércoles Melania a Periódico de Ibiza y Formentera.

Sin embargo, tal y como confiesa como una sonrisa, los inicios no fueron fáciles. «Poner en marcha todo fue una pequeña locura que me llevó casi dos años de burocracia, papeleo y visitas de técnicos para demostrar que todo reúne las condiciones que exige la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios que es quien se encarga de todos estos temas, pero finalmente creo que ha merecido la pena porque puedo trabajar y desarrollar mi pasión».

Actualmente Melania tiene el primer laboratorio de cosmética natural de Ibiza. Está en la zona de Ses Païsses, en Sant Antoni, y la joven ibicenca incide en que es todo natural. «Allí todo lo que hacemos se hace de forma completamente artesanal con material cien por cien lavable y con ollas y elementos como los que se empleaban antiguamente y sobre todo sin que haya nada artificial».

Sello muy ibicenco

Otro de los valores añadidos de Mel Ibiza es que se trata de un sello con claro sabor ibicenco ya que su creadora ha llegado a acuerdos con productores de la isla para sus creaciones.

Así, por ejemplo, emplea el aceite de oliva cien por cien ecológico de la almazara de Joan Benet para la base de sus jabones o el vino también ecológico de Can Rich para unos jabones pensados especialmente para pieles más maduras o secas. No son los únicos, ya que Melania ha llegado a acuerdos con Tierra de Ibiza y Sànima para que las plantas, Ibiza y Formentera Agua de Mar, Sal Torres para emplear la sal de las salinas de Ibiza o la asociación de apicultores de la isla para que la cera de las abejas. «Como ibicenca que soy para mí es muy importante que todo esté relacionado y no me ocurre mejor manera que llegar a acuerdos con firmas que trabajan en la isla y que buscan lo mismo que yo, un futuro más sostenible, natural y ecológico».

Fruto de ello es un amplio catálogo de productos. Entre los jabones hay mucho donde elegir «con aromas que transportan a lugares de paz y relajación» elaborados con caléndula y manzanilla, carbón y azahar, romero y tomillo, vino y rosas, lavanda y aloe vera y limón y hierbaluisa.

También hay tónicos faciales con agua de mar y romero, crema facial de vino y rosas, cremas para las picaduras de mosquitos de lavanda y caléndula e, incluso, repelentes de mosquitos elaborados con plantas naturales como la citronela, el geranio, el limón y la albahaca.

Todos estos productos se pueden encontrar en distintos herbolarios y tiendas naturales de la isla de Ibiza como Biosmell, Polen, Antigua simbólica o la alternativa Eco y en Formentera en Formentera verde y Natural.