La venta de calefactores y deshumificadores se ha disparado estos últimos días. | Daniel Espinosa

Ha llegado a toda la isla de Ibiza el intenso frío, con un descenso de temperaturas muy acusado, fuertes lluvias y vientos, y muchos son los que se han lanzado a buscar ese calefactor, esa estufa o ese deshumificador que les haga más soportable el día a día.

Algo que ha provocado que en varios establecimientos estén siendo unos días muy intensos a nivel de ventas como por ejemplo en Citubo donde una de sus responsables, Ángela Esteban, afirmó ayer a Periódico de Ibiza y Formentera que ha aumentado «considerablemente el número de compradores después de que estos meses previos hubieran sido algo flojos precisamente por la falta de frío».

Así, Esteban confirma que lo más piden los clientes son los radiadores, las estufas de leña y de pellet «que es algo muy novedoso y que se ha puesto muy de moda porque funciona muy bien» y también todo lo que tiene que ver con el textil especial para esta época como por ejemplo «los rellenos y fundas nórdicas o las sábanas de coralina, muy demandadas por su tacto suave, aterciopelado y muy agradable».

También llevan dos días intensos de ventas en Electrodomésticos Tur Rubio, en Santa Eulària. En este caso, según confirmaron a este rotativo, lo que más está buscando la gente «son estufas de cualquier tipo, desde las de gas a las eléctricas, pero también las que funcionan con aceite, y deshumificadores para las casas antiguas donde en estos días de tanta lluvia la humedad se convierte en uno de los peores enemigos».

Noticias relacionadas

Madera de olivo

Al mismo tiempo también ha crecido exponencialmente en apenas una semana la demanda de leña en la isla poniendo en serios aprietos a muchos vendedores que la tienen que traer directamente de la Península.

Es el caso, por ejemplo, de Maxi, quien se promociona a través de las redes sociales ofreciendo la posibilidad de llevar los sacos que se encarguen hasta la puerta del propio domicilio a precios realmente asequibles y que ve cómo se le está acumulando el trabajo ante tanta demanda. «La gente con el frío no para de llamarnos, pidiéndonos sobre todo madera de olivo, almendro o encina que al ser más dura tarda mucho más en consumirse pero al final tenemos el pequeño problema de que nosotros lo traemos todo desde la Península porque aquí en la isla ya casi no hay salvo que en algún momento nos llamen de alguna limpieza de algún terreno».
Lo mismo está sucediendo con otros lugares físicos especializados en madera y leña. Aunque prefieren no dar su nombre, la sensación es la misma con un aumento considerablemente de peticiones por parte de todo tipo de público. «Normalmente en esta época del año la gente viene a llevarse pino y olivo, pero al final estos días casi se ha descartado la primera porque aunque es blanda y se enciende más rápido la otra es más dura y aguanta mucho más el calor», explican.

El butano

Lo que, sin embargo, no ha aumentado a nivel de ventas son las bombonas de butano. Algunos de los establecimientos donde se pueden encontrar en la isla afirmaron a este periódico que «no han notado una subida significativa» con respecto a los días anteriores ni mayor afluencia de clientes en busca de la bombona regulada tradicional de toda la vida de 12 kilos y medio, que actualmente cuesta un precio fijado por el Gobierno de 17,66 euros, o la liberalizada de 12 kilos que está en unos 22 euros.
En este sentido, desde la compañía Repsol afirmaron que aunque las cifras exactas de ventas en Ibiza se sabrán a principios de febrero los parámetros que manejan «indican que el período del año en el que hay una mayor demanda es siempre el que va desde noviembre a marzo y que posiblemente esto no será una excepción en las Pitiusas».

Lo que se sí han constatado según sus datos es que en estos últimos años «cada vez más personas están volviendo a decantarse por el butano aprovechando que es un tipo de energía en el que se paga lo que se consume, lo que lo hace bastante más barato que otras alternativas». No en vano, según esta misma compañía, «este aumento no se limita únicamente a las zonas rurales o apartadas donde siempre llega el camión de reparto sino también entre muchas viviendas de grandes ciudades o zonas universitarias alquiladas por jóvenes que lo ven como una alternativa atractiva y útil para su estilo de vida o familias de tres o cuatro miembros que han comprobado que con cinco o seis bombonas pueden vivir sin problema a unos precios realmente razonables».

Asimismo, en zonas como Ibiza se ha convertido en algo muy demandado en segundas viviendas que se alquilan solo durante unos meses al año, dentro del sector Horeca que incluye a hoteles, restaurantes y cafés, y sobre todo en el campo de la gastronomía ya que muchos chefs consideran que el butano es básico para realizar sus platos en su día a día al darle un toque muy especial que no da ninguna otra alternativa», según concluyeron.