Ni el inicio de la temporada turística ha evitado la desaceleración de la economía pitiusa. | Archivo

La economía pitiusa es la que más ha crecido de todo el archipiélago en el segundo trimestre del año. Sin embargo, la actividad productiva en Baleares ha vuelto a entrar en fase de desaceleración después del paréntesis del primer trimestre del año, según se destaca en el informe Evolución Económica presentado ayer por la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB).

Ibiza y Formentera han vuelto a registrar un balance más favorable que el resto de isla al impulsar su economía un 4,3 % (en el primer trimestre creció un 7,1 %). Un porcentaje superior al registrado en Mallorca, que en el segundo trimestre ha crecido un 3,9 % (por el 6,3 % del primer trimestre) y también en Menorca, cuya economía ha crecido un 3,2 % de abril a junio, mientras que en el primer trimestre lo hizo un 5,8 %. El crecimiento del conjunto de Balears en el segundo trimestre del año ha sido del 3,9 %, 2,5 puntos menos que el registrado en el primer trimestre, que fue del 6,4 %.

«El buen inicio de la temporada turística nos ha permitido mantenernos mejor que el resto de nuestro entorno competitivo», señaló Carmen Planas, presidenta de la patronal CAEB.

A pesar de esta desaceleración en la economía, el archipiélago balear continúa recortando el ‘agujero’ que dejó la pandemia y se sitúa a un 2,4 % por debajo del nivel de actividad prepandemia, cuando en el primer trimestre estaba a un 3,2 %. Pese a que las economías de Mallorca y Menorca son las que menos crecen, estas dos islas son las que están más cerca de recuperar la riqueza que generaban antes de la pandemia, aunque todavía un 2,2% por debajo.

Desde CAEB señalaron que esta desaceleración también se está dando tanto en el conjunto de España como en las principales economías europeas.

Sectores

Desde el punto de vista de la oferta, la economía balear moderó durante el segundo trimestre el crecimiento en todos los sectores de actividad. En este sentido, el sector servicios continúa siendo el principal motor de la economía y registró un avance del 4,2 % (en el primer trimestre fue del 6,8 %) aprovechando el buen tono de actividad en el ámbito turístico en el periodo de Semana Santa y el inicio de la temporada de verano.

Por su parte, la construcción se mantiene por segundo trimestre consecutivo como el único sector económico de Baleares con una actividad por encima de los niveles prepandemia al registrar un crecimiento del 3,3 % (del 5,8% en el primer trimestre). Por el contrario, la industria es el sector donde más se hizo patente el debilitamiento de la senda de crecimiento al reducirse hasta el 1 % (en el primer trimestre creció un 1,9 %), «perjudicada por los condicionantes globales y, especialmente, por el repentino deterioro de la demanda externa».

El apunte

Se reduce la tasa de desempleo hasta el 4,7 %

A pesar de la moderación de la actividad, el empleo mantuvo el ritmo de creación de nuevos puestos de trabajo entre abril y junio (un 5,3 % por el 5,4 % del primer trimestre) y siguió evidenciando un mayor empuje que a nivel nacional (2,7 %). De hecho, los 623.732 trabajadores que se encontraban en la Seguridad Social a finales de junio constituyen un nuevo máximo de la serie histórica para esta época del año y suponen cerrar el segundo trimestre de 2023 con una tasa de desempleo del 4,7 % .