El Área de Salud de Ibiza gestionará en 2024 un total de 172,7 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 7,2 % y 11,6 millones más. Este incremento se explica por la inversión que se dedicará a la captación de nuevos profesionales sanitarios a través de las zonas de muy difícil cobertura y a la incorporación de una unidad docente de Pediatría, que se dedicará a la formación de médicos y enfermeras MIR en esta especialidad.
De esta manera, Pediatría se suma a Ginecología y Obstetricia, Farmacia Hospitalaria y Medicina Intensiva, especialidades cuyos MIR ya pueden formarse en el Hospital Can Misses. De hecho, en 2023 ya ha habido 70 MIR formándose en el hospital ibicenco, el triple que hace tres años.
En cuanto a inversiones en instalaciones, la Conselleria de Salud prevé abordar en 2024 la creación de un segundo box de paradas en Urgencias, la ampliación del laboratorio de Microbiología, un nuevo centro de fertilidad, una nueva Unidad Básica de Salut (UBS) en es Puig d’en Valls y el nuevo centro de salud de Formentera. También se estudiará el proyecto del nuevo centro de salud de es Viver, para el que en la pasada legislatura se convocó un concurso de ideas.
En el caso del centro de salud de Formentera, la idea es trasladarlo del hospital de Formentera a otro edificio que se construiría en las inmediaciones del centro sanitario. El objetivo es posibilitar el crecimiento tanto del hospital como del centro de salud. El presupuesto del Área de Salud par Formentera es de 8,4 millones de euros, un 3,4 % menos. Una disminución que se produce tras la finalización de las obras que se han llevado a cabo en el centro formenterés en el último año en la nueva base del 061 y en hemodiálisis.
Blindar el sistema
La consellera de Salud, Manuela García, explicó el pasado martes en el Parlament los pormenores del presupuesto de su conselleria para el año 2024. Según aseguró García, estas cuentas «blindan» la construcción y el desarrollo de un sistema sanitario «universal, de calidad y con los usuarios y profesionales como elemento central».
Concretamente, detalló García, para el próximo año 2024, la Conselleria Salud contará con un presupuesto de 2.354,4 millones, lo que supone un aumento del 5,1% respecto del 2023.
Así, según la consellera, estas serán las cuentas más altas desde el traspaso de competencias del Gobierno a comunidades, en 2002, puesto que uno de cada tres euros se destina a salud.
De estos presupuestos, la consellera destacó que la partida más amplia del presupuesto de Salud se destinará en 2024 al IBSalut, que dispondrá de 2.275 millones, lo que supone un incremento de más de 82 millones y un 3,7%. Además, García señaló que a esta cantidad hay que añadir el aumento de subida salarial desde el 1 de enero a todos los empleados públicos de la Comunidad y la reactivación de la carrera profesional.
El capítulo relativo a gastos de personal crece de este modo un 4,3% hasta los 1.067 millones. Casi uno de cada dos euros se destina a pagar las nóminas de los cerca de 20.000 profesionales que trabajan en el Servicio de Salud. García reiteró en este sentido que «el mejor y mayor activo que tiene la Conselleria son sus profesionales».
Esto significa un incremento de 43,5 millones, que irán destinados principalmente a programas de fidelización y captación de sanitarios, así como a consolidar y estabilizar el personal interino en personal estatutario fijo a través de los procesos de estabilización que finalizarán el 31 de diciembre de 2024.
Asimismo, el presupuesto del IBSalut para el 2024 tiene como uno de los objetivos principales la atención primaria, que crece en 52,1 millones, y que alcanza los 620,8 millones de euros, lo que supone un incremento del 9% respecto del presupuesto de 2023. Y, otro de los grandes retos será las listas de espera que, con la intención de reducirlas, se han presupuestado aproximadamente 22 millones.
Salud mental
La Dirección General de Salud Mental de este Govern contará con un presupuesto de 5,2 millones. De estos, destinará 1,4 a poner en marcha programas como la coordinación asistencial, la atención a la población infantojuvenil, los programas de salud mental para los profesionales de la salud o a potenciar los dispositivos que atienden personas con un trastorno mental grave.
«Promover el abordaje de la salud mental basado en la humanización, los derechos humanos y la erradicación del estigma por razones de salud mental será otro de los grandes objetivos de esta dirección general, junto con la prevención del suicidio y la actuación sobre la soledad no deseada», afirmó García.
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