Un momento del ejercicio del ejército este miércoles por la tarde en las instalaciones de sa Coma en Ibiza. | Irene Arango

Esta semana se encuentra desplegada en Ibiza una sección de 26 militares del Ejército de Tierra para realizar maniobras encuadradas en la campaña de Plan Vigilante Balear (PVB), que como todos los años elabora el Cuartel General de la Comandancia General de Baleares.

La teniente Jiménez del Regimiento Palma 47 explicó a Periódico de Ibiza y Formentera que tienen dos objetivos principales. El primero, de cara a los mandos, es el planeamiento y la proyección desde la isla de Mallorca a la isla de Ibiza tanto de personal como de equipo y material, con lo que ello conlleva de barco y desplazamiento. La teniente afirmó que para ellos es importante llevar a cabo este planeamiento y cumplir los plazos logísticos. Por otro lado, el segundo objetivo, y el más importante según Jiménez, es dar presencia de las unidades en Baleares y normalizarla en la calle a través de marchas a pie y motorizadas. En el resto de tiempo complementan la actividad con instrucciones individuales o particulares con el personal, ya sea en la base o fuera del ámbito civil.

El periodo de maniobras dura toda esta semana lectiva. El lunes y el viernes lo destinan exclusivamente a temas logísticos de barco y convoy, por lo que los días que restan son para dar estas marchas.

El objetivo de las marchas es acostumbrar a la población ya que, según afirmó la teniente Jiménez, el trabajo diario que el regimiento realiza es desconocido y para los ciudadanos resulta «raro encontrarse militares en la calle». Para ello realizan una marcha a pie cada mañana y una motorizada cada tarde, localizadas en el oeste, este y norte de la isla. Así, este pasado martes recorrieron la población de Sant Josep y este miércoles han recorrido Sant Antoni. La teniente Jiménez aseguró que la reacción de la población ha sido positiva, aunque reconoce que en general al principio «se asombran un poco porque no entienden por qué hay militares».

La actividad realizada este miércoles por la tarde ha sido una marcha motorizada en el destacamento de la UME de Sa Coma, que es realizar una patrulla pero con vehículos. Esto conlleva comprobar el estado tanto de los vehículos como del personal para asegurar que esté operativo. Una vez que los conductores y el jefe de personal dan el visto bueno, el resto del grupo debe embarcar. El encargado coloca a los vehículos en posición de salida y cuando que esté todo preparado se inicia la marcha. El número de soldados que van en cada coche depende de los que haya disponible en ese momento. En este sentido, para el ejercicio de este miércoles precisaron dos soldados detrás, un conductor y un copiloto, bajo la supervisión de la teniente.

El grupo de desplazados está conformado por una teniente al mando, dos cabos y 23 soldados. Han proyectado seis vehículos ligeros y un camión donde traían toda la carga y el material logístico para las maniobras. Estos desplazamientos y la cantidad de desplazados para maniobrar varían, pero se realizan cotidianamente tanto en Ibiza como en Menorca, y además, un pequeño destacamento se dirige semanalmente a Cabrera.