La Calle del País Valencià del municipio de Ibiza se encuentra en el barrio de ses Figueretes, alberga en sus 300 metros diferentes locales, pero sobre todo destaca por ser una zona con una amplia oferta de gimnasios. Por eso en la zona cada vez es más común encontrar a los vecinos que viven en sus edificios, así como a deportistas.

Ana vive allí desde que nació su hija, hace casi medio siglo, por ello conoce de primera mano como ha cambiado su zona: «Yo estoy contenta, yo vivo aquí muy a gusto, si mi hija tiene 46 años pues eso llevo yo por aquí, ella ya vive por otro barrio… el colegio este antes no estaba, ahí había un descampado pero luego hicieron aparcamiento y luego construyeron el colegio, ahora por aquí es muy difícil aparcar pero yo estoy muy contenta con que hayan hecho la escuela». Raquel, también vecina de la zona, va de camino al dentista que le queda en la calle transversal, la Av. Espanya, como ella vive en Can Misses, asegura que toda la vida ha pasado por esta zona para acercarse a la ciudad, entonces va viendo cómo cambian las cosas: «Mira si me pongo a fijarme te puedo decir que todo esto nuevo, antes había un bar que hacía esquina y ahora es un gimnasio, al lado había una tienda de muebles y ahora es un café… la verdad que por aquí hay bastante gente joven y es una zona muy tranquila».
De paso también está Larisa, una cubana que andaba en busca de empleo ya que «hay una oferta de secretaria por aquí» e intentaba dar con el lugar. A pesar de llevar poco tiempo aquí asegura que suele pasear por esta vía, que le parece «muy bonita porque desemboca en el mar». Además destacan unas palmeras que el viento en estas fechas ondea y luce de sobremanera, lo que Marina, otra vecina, menciona por su belleza.

Diego ya no vive en la zona pero su moto continúa aparcada en un garaje de País Valencià y no en vano, ya que admite que «es una zona a la que le tengo mucho aprecio, es un lugar lindo para vivir, además en verano pasan turistas pero no es una zona muy transitada por ellos». Lo mismo que siente Yamilet, una joven que aunque se haya mudado demuestra que sigue siendo su zona, de hecho, los vecinos al pasar la saludan. Ella asegura que le «encanta seguir viniendo a hacer cosas por aquí», incluso podría ir a otro gimnasio pero elige el de esta calle, porque además «casi siempre hay párking, y es fácil comparada con otras» considera.

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Las peluquerías

En las tres calles de las que se compone País Valencià se hallan dos peluquerías especializadas en corte de caballero. David Mendieta es el dueño de la última que abrió, él se mudó de Av. Espanya este 8 de enero a su nuevo local y ya puede hacer una comparación: «Creo que aquí recibo la misma cantidad de personas pero son diferentes, a mi me da la impresión que por esta vía van más de prisa, allí en cambio pasean más porque está cerca de la playa y hay más comercios. Pero aquí no había caído en cuenta que hay un semáforo justo en la esquina y cada vez que se paran sin querer miran para aquí y se fijan en la peluquería. En el otro local estuve ocho años pero según veo el flujo de personas y de coches es impresionante». Mendieta también señala los gimnasios, porque quienes acuden suelen ser «los hombres se cuidan mucho».

‘La Barbiere Ibiza’ es la más antigua, Alejandro lleva atendiendo clientes desde hace ocho años y para él lo único que ha cambiado en los últimos años «es la fluidez de la gente que viene por aquí, justamente por el gimnasio de la esquina sobre todo, porque las instalaciones se agrandaron». Entre eso y los chicos que salen del colegio indica que «hay horas en las que los clientes nos dicen que se les complica más aparcar». Pero asegura que con los vecinos siempre ha habido buena respuesta, pues «muchos son clientes y la gente se conoce entre todos».

Los gimnasios

Está claro que lo más destacado para cada viandante que por allí discurre es la cantidad de gimnasios que alberga. Irene, por ejemplo, hace años siempre acudía a uno que ya cerró y explica que antiguamente no había muchos en Ibiza, por lo que al parecer «se fueron concentrando todos aquí».

El centro deportivo que más atención acapara y reluce en sí mismo por su fachada es el VIP Gym, que ocupa media calle del País Valenciá incluida la esquina, y su transversal la tiene prácticamente entera. Vladimir es uno de los dueños y asegura que su negocio tiene un impacto positivo: «Para nosotros todo es positivo, actualmente tenemos 1.600 socios activos, en verano sube a 2.500, nosotros abrimos hace dos años y medio y constantemente estamos ampliando, hasta que lleguemos al final de la calle (la transversal), que ya tenemos apalabrados los locales. Nosotros creemos que nuestro gimnasio ha afectado de manera positiva, porque antiguamente había bares aquí que acogían a borrachos, gentuza, había problemas, venta de drogas, y ahora es un ambiente totalmente diferente, es gente sana, deportista, que no se toman cervezas, sino batidos de proteínas, no hay peleas, todo apunta bien. Nosotros además hemos puesto focos por toda la fachada y por la noche la calle está iluminada, yo considero que hemos contribuido bastante en darle vida y alegría».