Imagen de archivo de la desaladora de Santa Eulària.

El grupo ecologista GEN-GOB ha considerado este viernes que construir una cuarta desaladora en Ibiza es «una auténtica irresponsabilidad», a la vez que también ha manifestado su rechazo sobre la ampliación de las plantas existentes.

En un comunicado, los ambientalistas señalan que, con las políticas actuales de uso del agua, las desaladoras «en lugar de reducir el consumo, lo favorecen todavía más», a la vez que se utilizan para «desbloquear» nuevos crecimientos urbanísticos en todos los municipios.

Según apuntan, estos crecimientos, «en ningún caso justificados», comportarán un empeoramiento de los problemas que ya sufre la isla. Al respecto, han puesto como ejemplo el proyecto urbanístico de Ca n’Escandell, en la capital insular, donde se proyectan 532 viviendas sociales.

Asimismo, indican que los costes económicos de explotación de las plantas desaladoras «es enorme» y que «consumen combustibles fósiles». En este punto, los ecologistas agregan que «apostar por el incremento» de las emisiones de C02 «es una locura» ante la evidencia científica de posible «colapso mundial» a causa del cambio climático.

El GEN señala que las desaladoras existentes se tienen que considerar como una «solución provisional, nunca como un punto de partida» y se pregunta si se construyen nuevas desaladoras «para pagar entre todos el agua que malogran administraciones, usuarios y turistas, pobladores de segundas residencias y chalés con piscina».

«Incomprensiblemente, siempre se ponen los intereses económicos inmediatos y de una minoría por delante el interés general y de la sostenibilidad», critica la organización ecologista.
Entre otras cuestiones, desde el GEN lamentan que nadie habla de «decrecimiento» como una parte «fundamental e ineludible» de la solución, ni tampoco de los «graves problemas» que provocan los derrames de las plantas desaladoras.

Recomiendan poner atención a los trabajos del doctor Esteban Morelle-Hungría, que ha «estudiado bien» el impacto de la salmuera en la posidonia y que ha concluido que a mayor número de desaladoras, «menos posidonia quedará».