Ibiza y Formentera reciben dos concesiones para regar con agua depurada y desalada

Por un lado, se ha probado el uso de 263.696 m³ anuales de aguas depuradas para la Comunidad de Regantes de Formentera, según ha informado este sábado el Govern balear.
Estas aguas provienen directamente del efluente de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de la isla y serán empleadas específicamente en las parcelas agrícolas administradas por la Comunidad de Regantes, ha añadido el comunicado del Ejecutivo balear.
La concesión se ha otorgado con un plazo inicial de diez años y con la posibilidad de solicitar una prórroga.

La segunda concesión es para Ibiza y tiene el objetivo de poner en servicio el funcionamiento de la balsa de riego de Sa Rota en Santa Eulària, construida en 1995 y parada desde el año 2000.
La Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural ha recibido la concesión para utilizar 87.000 m³ de agua desalada durante los meses de invierno, procedentes de la planta desaladora de Santa Eulària.
Con esta puesta en marcha, se pretende mezclar el agua desalada con el agua depurada de la balsa de Sa Rota, para corregir el alto nivel de salinidad que impacta negativamente en los cultivos. Se trata de una solución temporal hasta que se pueda reducir la salinización del agua que llega al sistema de saneamiento y depuración.

Además, debido a la sequía y para cubrir las necesidades de riego, Recursos Hídricos ha autorizado un suministro urgente y provisional de 2.000 m³/día de agua procedente tanto de la depuradora como de la desaladora de Santa Eulària.
Este suministro temporal, concedido por dos meses, garantizará que la agricultura en Ibiza pueda continuar sin interrupciones mientras se concluye la concesión definitiva.
Esta autorización tiene un informe favorable emitido por Abaqua, que determina su "viabilidad" sin comprometer el abastecimiento a los núcleos urbanos, han señalado desde el Govern