La falta de personal continúa siendo, a día de hoy, uno de los principales problemas de Ibiza.
No es de extrañar encontrar numerosos comercios que exponen en sus escaparates anuncios de búsqueda de personal, especialmente de cara a la próxima temporada estival. El alto coste de la vida en la isla y la dificultad de encontrar alojamiento pone en ‘jaque’ a muchos negocios que ven que, un sueldo más atractivo que en la península ya no es un reclamo para muchos trabajadores.

Optimismo y prudencia

La falta de empleados golpea especialmente a aquellas empresas que se mantienen abiertas todo el año frente a aquellas que únicamente están activas en verano. En este sentido, Alfonso Rojo, presidente de Pimeef, asegura que, tras la pandemia se produjo una consolidación que se mantiene a día de hoy. «Las empresas de todo el año consiguieron cumplir prácticamente con todas las vacantes en sus plantillas. Esperamos que este año se vuelva a repetir la misma situación y con esa pequeña certidumbre están trabajando los comercios. Somos optimistas», aseguró Rojo. «Mucha gente que no vino a trabajar hace dos años, la temporada pasada sí decidieron volver. Normalmente cuenta con los fijos discontinuos, no como el año de la pandemia que muchos no volvieron a su puesto de trabajo porque ya tenían un puesto fuera», puntualizó el presidente de Pimeef.Muchos negocios no las tienen del todo consigo de cara a poder contratar personal. El problema que muchos achacan, frente a grandes cadenas de restauración de la isla, es la incapacidad de poder ofrecer alojamiento a sus futuros trabajadores. «A finales de marzo o abril se suele incorporar más personal. Suelen ser tres trabajadores más que están durante todo el verano. Sé de mucha gente que quiere venir pero no pueden por el tema de la casa», explicó Matías, encargado de ‘Barber’s Shop’, una peluquería para hombres que abrió sus puertas en mayo del año pasado. «Nosotros no podemos ofrecer casa. El año pasado vinieron un par de trabajadores y se tuvieron que volver por este motivo», explicó Matías.

En el caso de negocios abiertos como todo el año, como en La Sirena o Harinus, también ven preocupación por la contratación de empleados. «Cada año en verano empieza el baile y este año más todavía por el tema de la vivienda. Si no ofrecemos casa, la gente no viene. Nosotros, por suerte, contamos con personal de todo el año», señaló Hassan, responsable del Harinus situado en Avenida España. «Tengo muchos amigos que han estado muchos años en Ibiza y ella no vienen por el tema de la vivienda», finalizó el encargado.

Victoria, encargada de La Sirena de la calle Bisbe Abad y Lasierra, también ve como la desesperada situación de la vivienda está mermando la posibilidad de encontrar personal. Todas las tiendas tienen colgado un cartel de búsqueda de empleados. «Hay mucha gente que, por culpa de la situación de la vivienda, no les sale rentable venir a trabajar aquí», explicó la encargada. Además, encontrar casa es todavía más complicado en el municipio de Ibiza. «Tenemos una compañera que vive en Cala Vadella y, además, hace turno partido porque en las tiendas funciona así. En el centro es imposible. Otra chica que estaba trabajando aquí estaba pagando 2000 euros de alquiler», finalizó.

‘Robo’ de trabajadores

Asimismo, Victoria destaca una de las grandes quejas por muchos de los pequeños y medianos negocios: el ‘robo’ de trabajadores. «Muchas veces a mitad de verano, les ofrecen otro trabajo donde pueden ganar más dinero y te quedas tirada y luego no encuentras gente. Hay veces que hemos sido más trabajadores en invierno que en verano», explicó la encargada de La Sirena.

Sin embargo, afirma que en las empresas de todo el año las plantillas están muy «sobre-dimensionadas» en temporada baja para «fidelizar» a los trabajadores y poder garantizar que se quedarán toda la temporada turística.

Asimismo, respecto al tema de la vivienda, Rojo ha asegurado que, pese a que una Pimeef no puede asegurar ese aspecto al trabajador, sí funciona muchas veces como intermediario entre el arrendador y el trabajador.