Según ha informado la entidad, este martes, a través de un comunicado, los municipios de más de 10.000 habitantes tienen la obligación de iniciar dichos planes en un plazo de seis meses desde la aprobación de la ley mediante el envío al Govern de un inventario de las infraestructuras, instalaciones y puntos de vertido.
De acuerdo con la Alianza por el Agua, la actual falta de renovación y control del alcantarillado municipal provoca la pérdida de la calidad de las aguas de baño y litorales.
En este sentido, han advertido sobre los recientes vertidos de fecales registrados en el puerto que se podrían reducir con la implementación de los planes integrales de gestión de saneamiento.
La entidad ha denunciado que el mal estado de las tuberías provoca la contaminación fecal de suelos y aguas del litoral y la entrada de agua marina al alcantarillado, imposibilitando la reutilización de las aguas depuradas por el exceso de sal de las aguas que reciben las depuradoras.
Por tanto, los planes tienen como objetivo ejecutar medidas preventivas para la retención natural y recogida de aguas pluviales y contemplan medidas de operación, inspección o mantenimiento.
La Alianza ha recordado que los partidos políticos firmaron el Pacto por el Agua en 2021, donde se incluye la implementación de estos planes.
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