Un barco de más de 15 metros en las instalaciones del Náutico, ahora gestionadas por PLyS.

La portavoz de la Asociación de Amarristas del Club Náutico Ibiza, Naihara Cardona, denunció este miércoles que la nueva concesionaria, Puertos y Litorales Sostenibles (PyLS), está aceptando la entrada de barcos de mayor tamaño de lo autorizado por la concesión. Cardona recordó que, según la concesión de la Autoridad Portuaria de Baleares (APB), PyLS solo puede aceptar barcos de menos de 15 metros de eslora. Sin embargo, siempre según su denuncia, estarían entrando barcos que superarían esta medida.

Cardona explicó que, en el pasado, el Club Náutico Ibiza podía acoger embarcaciones con esloras superiores a los 15 metros. Pero, en la nueva concesión, esto no es así. Por lo que se pregunta si la APB «está controlando este incumplimiento». La portavoz de los amarristas afirmó que este mismo miércoles había amarrado «un barco de 15,80 metros» y añadió que las embarcaciones que superan el tamaño autorizado por la APB y cuyos propietarios aceptan abonar las tarifas impuestas por PyLS «se están quedando». «PyLS cogen los barcos que pagan, tengan los metros que tengan», según precisó.

Pequeñas esloras

La portavoz de la asociación por otro lado, insistió en que, con la nueva concesión, los amarristas de base de pequeñas esloras pagarán más de lo que abonaban en el pasado por tener allí sus embarcaciones. Estos barcos tienen un tamaño inferior a los ocho metros y, antes de la llegada de PyLS, pagaban 0,21 euros por metro cuadrado y día mientras que ahora tendrán que abonar 0,40 euros por metro cuadrado y día. En este sentido, Cardona afirmó que la APB fija una tarifa máxima, la de 0,40 euros, que en el pasado se reducía, por acuerdo de los socios del club, a 0,21 euros. Ahora, con PyLS al frente, se aplica en su totalidad. A ello sumó que muchos de estos usuarios no han recibido aún el presupuesto de lo que tendrán que abonar por tener allí sus embarcaciones. «Solo se ha enviado a los propietarios de los barcos grandes y pidiendo que se pague un año por adelantado», según lamentó, «ante esta situación, unos se han ido y otros han cerrado tratos por precios más bajos».

Naihara Cardona, finalmente, recordó que «lo más importante ahora mismo es el problema de la inseguridad porque es un puerto inseguro». En este sentido, subrayó que la concesión obliga a PyLS a llevar a cabo las intervenciones comprometidas. Lo mismo sucede con otras compromisos como la escuela de vela o el restaurante. Nada de ello está en marcha en estos momentos. «La autorización es por 12 meses», recordó la portavoz de los amarristas, «y yo entiendo que, si no cumplen, la APB no les renovará. ¿O lo va a hacer aunque no cumplan? Está claro que PyLS quiere ganar dinero pero ya hay flagrantes incumplimientos que la APB está permitiendo».

En su conversación con Periódico de Ibiza y Formentera, Cardona, finalmente, quiso responder a las críticas de PyLS a los anteriores gestores relativas a que se llevaron el mobiliario, los ordenadores y los TPV. Y es que, ha recordado, la nueva concesionaria incluyó en su oferta una partida de 14.633 euros para, precisamente, la adquisición de estos enseres. Así, el listado contemplaba la compra de mobiliario de oficina (1.500 euros), teléfono móvil (150 euros), impresora/copiadora (400 euros), equipos informáticos (800 euros), instalación del sistema Pandora (8.000 euros), radio VHF fijo (600 euros), VHF portátil para atención al cliente (165 euros), TPV (200 euros), panel de información para clientes (59 euros) y plano de las instalaciones y amarres (59 euros). «El club les hizo un favor», concluyó Cardona tirando de ironía, «¿Por qué lloran ahora si se lo han llevado todo? Si no se lo hubieran llevado, tendrían que haberlo sacado de ellos dado que lo iban a comprar todo nuevo».