Por segundo día consecutivo continuaron ayer las tareas de búsqueda de la avioneta que desapareció el miércoles entre las Islas Columbretes y Eivissa con siete estadounidenses y dos españoles a bordo. La hipótesis que cobra más fuerza es la de un accidente. La avioneta, un aerotaxi FTL 101 modelo Metro, de la compañía Flightline con base en Barcelona, partió el miércoles por la mañana de la Ciudad Condal y tenía prevista su llegada a Argelia, posiblemente a Orán, a primera hora de la tarde. La travesía, pues, debía durar menos de tres horas, pero a las 11.40 horas el aerotaxi contactó con la torre de control del aeropuerto de Manises (Valencia), ya que al parecer tenía problemas por la tormenta que afectaba a esas horas la costa mediterránea.

Fuentes del Consulado de EEUU informaron de que los siete viajeros estadounidenses de la avioneta desaparecida trabajan en el sector de la energía y se dirigían a Orán para incorporarse a una de las compañías que operan en esta zona. Un octavo ingeniero llegó tarde al aeropuerto y no pudo salir con el resto de sus compañeros, de ahí que en un principio se pensara que eran ocho los estadounidenses. La compañía Flightline es una empresa que ofrece servicios aéreos de viajes de negocios, ferias y congresos, visitas de empresa y en ocasiones transporte de carga urgente. Su flota se compone de aviones turbo-hélices con altas prestaciones de velocidad y autonomía.

El portavoz de la compañía Flightline S.L., Ramón Sagrario, explicó ayer a Ultima Hora que el aerotaxi había pasado «todas las revisiones» y que el piloto que estaba a los mandos era «el jefe de pilotos de la compañía», el «más experimentado» y con unas 4.000 horas de vuelo. Sagrario, ex piloto, aseguró que los pasajeros subieron al vuelo tras pasar los controles en el aeropuerto de El Prat. El portavoz señaló que los dos pilotos son catalanes y reconoció que la hipótesis más probable es que el avión «haya caído al mar», aunque precisó que «oficialmente» el aerotaxi está «desaparecido». En las actividades de búsqueda también está participando Salvamento Marítimo, que emite comunicados a los barcos que navegan cerca de la posición donde se entró en comunicación por última vez con el aparato, por si encuentran indicios de accidente o tienen noticias de los pasajeros.

El hecho de que en el aerotaxi viajaran ciudadanos norteamericanos encendió en un primer momento todas las señales de alarma, máxime cuando se confirmó que un pasajero no tomó el vuelo a tiempo. Sin embargo, las fuentes consultadas han informado que se descarta que se tratara de un acto terrorista por el conflicto de Afganistán. La delegada del Gobierno en la comunidad Valenciana, Carmen Mas, por su parte, manifestó que el aparato desaparecido estaba equipado con una caja negra, lo que permitirá conocer lo ocurrido si se encuentra el aerotaxi. El 112 del Govern informó también que el mal tiempo obligó la los aviones de rescate a buscar a poca altura y, por tanto, abarcando menos espacio.