Dos individuos que cubrían sus rostros con pasamontañas e iban armados con cuchillos irrumpieron en la madrugada de ayer en un hotel de Cala Mesquida, en Capdepera, y tras encerrar al conserje en un cuarto registraron la recepción en busca de dinero. La Guardia Civil montó un gran dispositivo de búsqueda, pero todavía no ha podido localizar a los sospechosos.

De acuerdo con las fuentes consultadas por este periódico, sobre las 2.30 horas dos individuos llegaron al Hotel Cala Mezquida a bordo de un automóvil Seat Ibiza de color blanco y, sin demora, se desplazaron hasta la recepción. El conserje no tuvo tiempo de reaccionar y los dos sujetos, que cubrían sus rostros con pasamontañas y empuñaban navajas, lo obligaron a entrar en un cuarto próximo, donde lo dejaron encerrado. En los minutos siguientes procedieron a registrar minuciosamente cajones y mesas, en busca de dinero en efectivo, y encontraron al parecer unas 50.000 pesetas. Los ladrones también se llevaron la cartera del empleado, y aunque no ha trascendido qué había en su interior es de suponer que contenía tarjetas de crédito y cierta cantidad de dinero. El hombre profirió gritos para alertar de su situación y fue liberado por el vigilante jurado que realizaba la ronda y acudió alarmado por aquel alboroto.

Cuando la Guardia Civil fue informada de lo ocurrido se montó un amplio dispositivo de búsqueda, en el que también participaron las policías locales de la zona. Los funcionarios controlaron las carreteras principales y también las secundarias, en busca del Seat Ibiza, y realizaron batidas preventivas por Capdepera por si los delincuentes se habían refugiado en aquellas calles. El operativo no dio resultado.