Las llamas se propagaron con rapidez y en poco tiempo calcinaron el salón de la casa. Foto: KIKE TABERNER.

Toni Planells y Juan Manuel Domínguez se hallaban ayer a la espera de conocer los daños reales que causó un incendio que anteanoche se declaró en la casa de campo de Benirràs que cada vez más frecuentan. El fuego se produjo por sorpresa al explosionar un televisor, según ellos mismos relataron. Las llamas destruyeron en pocos minutos el salón y se cebaban en el porche cuando los bomberos intervinieron.

Nadie resultó herido ya que se pudo salir con rapidez de la vivienda, ubicada cerca de la carretera, a unos 30 metros, y a menos de un kilómetro de la playa. Fuentes del servicio contraincendios de Eivissa informaron que en el momento de actuar había al menos un adulto y un niño de unos siete años en la casa.

El Parque Insular recibió el aviso poco antes de las nueve de la noche. Cinco bomberos, apoyados por dos camiones, estuvieron trabajando en la casa hasta cerca de las once de la noche, hora en la que se pudo dar extinguido por completo el fuego. El calor y las llamas afectaron visiblemente a uno de los laterales de la estructura del edificio. Ayer estaba previsto que los peritos realizaran un examen en profundidad para constatar con mayor precisión los daños sufridos a causa del incendio y si hubiera peligro de derrumbe.