La barrera de contención que instalaron los equipos de salvamento que evitaron que el barco de cruceros «Vistamar» volcara y se hundiera en el dique de Botafoc ha cumplido su misión. Ayer por la mañana, un penetrante olor a gasoil y aceite de motor dominaba el ambiente en los alrededores decrucero, aún atracado en el dique de Botafoc. Los bomberos, que aún trabajaban con las bombas para achicar el agua del casco de este gran barco de más un centenar de metros de eslora, y los submarinistas, que todavía comprobaban que están bien taponadas las vías de agua del «Vistamar», estaban completamente cubiertos de combustible.

«No ha habido ningún escape de fuel», apuntó uno de los bomberos, «los hidrocarburos que están en el agua han salido del casco porque toda la sala de máquinas está inundada y entonces el aceite de los motores se ha salido». Nadie fue capaz de cuantificar la cantidad de hidrocarburos que han acabado en las aguas de Botafoc. En previsión de un desastre mayor, la Autoritat Portuària de Balears instaló una barrera de contención con el fin de impedir que los hidrocarburos contaminen las aguas del puerto de Eivissa. Finalmente, la barrera, que cierra un área que supera los 50 metros cuadrados, ha cumplido su misión.

«Ahora estamos a la espera de que lleguen los disolventes para eliminar toda la grasa que está alrededor del barco», apuntó uno de los hombres del Cuerpo de Bomberos que está ultimando los trabajos. En el caso de que sea necesario, la Autoritat Portuària de Balears contempla la posibilidad de enviar un barco desde Palma o desde la Península especializado en eliminar este tipo de vertidos, que en aguas tan transparentes frágiles como las de las Pitiüses pueden resultar fatales.