Tres jóvenes han sido detenidos después de que se comprobara que habían pasado dos noches en el hotel Palm Beach de Plata dén Bossa, perteneciente a la cadena Fiesta Hoteles. Fueron sorprendidos por los trabajadores del hotel, que se quedaron atónitos al ver que en una de las habitaciones las camas estaban desechas y con aspecto de haber sido usadas.

Ayer, en el juzgado de guardia, los tres detenidos, un croata, un belga y un marroquí, reconocieron los hechos y se declararon en consecuencia autores de un delito de usurpación.

Los tres aceptaron la pena que solicitó para ellos el Ministerio Fiscal: una multa para cada uno de tres meses por cuatro euros diarios, lo que hace un total 360 euros.

Además, entre los tres tendrán que pagar el coste de la habitación por las dos noches que la ocuparon, que es de 200 euros.

Fuentes judiciales informaron de que los jóvenes no causaron ningún desperfecto en el interior del hotel y de que, además, tuvieron la deferencia de utilizar tan sólo una habitación y no una para cada uno.