Se trata del psicólogo, que ha evaluado su estado anímico; del educador, que se ha puesto al corriente de su situación personal; del trabajador social, que ha conocido la problemática «exterior» de su caso; y del médico, que le ha sometido a una revisión para detectar enfermedades. El informe de los especialistas ha sido concluyente: De Santos no se ha adaptado todavía al régimen penitenciario y no hay ningún indicio que haga pensar que lo hará en breve.

El ex político del PP sigue recluido en el Módulo de Ingresos, acompañado de un preso de 'apoyo' que vela por su seguridad. De Santos se mezcla en determinadas horas con otros presos, pero sólo de ese departamento. De esta forma, desde la Dirección de la prisión se quiere evitar que algún interno agreda al ex edil. Las fuentes consultadas añadieron que «la presión mediática» del caso es muy fuerte y que el asunto De Santos está a diario en los medios de comunicación, lo que hace que muchos reclusos sepan que está entre rejas por un asunto de supuesta pederastia. Este tipo de delitos está muy mal visto entre los presidiarios y es muy probable que uno o varios intentaran tomarse la justicia por su mano en caso de coincidir con él en alguna dependencia común.

Los informes de los técnicos que han tratado a De Santos servirán, más adelante, para clasificar al preso y dependiendo de esta clasificación será recluido en un módulo u otro. De momento, sin embargo, el ex edil del Ayuntamiento de Palma está en la penitenciaría como preventivo, a la espera de juicio, y por consiguiente no tiene una clasificación fija.