Javier Jiménez12/12/08 0:00
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La Policía Judicial de la Guardia Civil está investigando el violento atraco que se registró en la madrugada de ayer en un locutorio de la localidad mallorquina Inca y que se saldó con dos empleadas hospitalizadas. Los mismos delincuentes, que iban armados y con pasamontañas, se desplazaron después a Santa Maria y cometieron un segundo asalto, a un viandante que caminaba por una calle.

A las dos de la madrugada dos individuos con acento sudamericano irrumpieron con estrépito en el locutorio de la calle Santo Domingo, en Inca, enfrente de la iglesia del mismo nombre. Iban encapuchados, para que no pudieran reconocerlos, y con gran violencia exigieron a las dos empleadas que les entregaran el dinero de la caja. A una de ella la agredieron y su compañera, al presenciar los golpes, sufrió un ataque de histeria.

Los dos ladrones huyeron con un escaso botín, de unos 100 euros, y cuando los agentes llegaron al negocio se encontraron a las dos mujeres en un estado lamentable.Ambas fueron evacuadas a un centro hospitalario y una de ellas, la que recibió algunos golpes, quedó ingresada para que los médicos pudieran seguir de cerca su evolución. La otra se calmó y horas después pudo volver a su casa.

Dispositivo

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La Policía Judicial registró el local en busca de huellas de los sospechosos y desde la Comandancia de la Guardia Civil se puso en marcha un dispositivo para controlar los vehículos que entraban y salían de Inca. La pareja, sin embargo, no pudo ser localizada y todo indica que consiguió llegar a Santa Maria, donde poco tiempo después se produjo un segundo atraco de similares características. En esa ocasión, la víctima fue un hombre que caminaba por la calle de madrugada y que de improviso se vio rodeado por dos individuos, de estatura mediana-pequeña, y que cubrían sus rostros con sendos pasamontañas. Esta vez, afortunadamente, el atracado no resultó herido, pero no ha trascendido si los dos delincuentes consiguieron el botín. Cuando la Guardia Civil se entrevistó con la víctima, contó que los dos individuos eran de nacionalidad sudamericana, por el acento que gastaban.

La Policía Judicial tiene la certeza de que se trata de los dos mismos sujetos que actuaron en Inca poco tiempo antes y todo indica que se desplazaron hasta Santa Maria en un coche.