La responsable del juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, la juez Clara Ramírez, absolvió ayer a un hombre al que su hijo, de 20 años, denunció por supuestamente haberle golpeado cuando éste quiso entrar en su habitación. «No quería que viera el desorden», dijo ayer el joven, persona que afirmó en el juicio que su padre sólo le sujetó cuando él intentó agredirle. Luego, en la calle, el hijo ocasionó destrozos al coche de su progenitor.