La Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía está investigando el robo que se produjo el pasado domingo en el supermercado Eroski de Vila Park, junto a los Multicines, informaron ayer diversas fuentes. Desde la empresa explicaron que el robo se produjo de noche, cuando el establecimiento estaba cerrado, y que los ladrones consiguieron llevarse el dinero recaudado durante la jornada del sábado, unos 20.000 euros, aproximadamente. Antes de llegar hasta la caja fuerte desconectaron la alarma. Al parecer, Eroski tiene contratada a una empresa de seguridad que se encarga del transporte diario de la recaudación.
En la caja fuerte
El dinero estaba dentro de la caja fuerte del local, que los ladrones lograron encontrar y abrir. No han trascendido los detalles de cómo lo hicieron. Sí se sabe que los cacos entraron en el local por una de las puertas laterales, que al parecer tuvieron que forzar. Una vez dentro del supermercado, se dirigieron a la caja fuerte y una vez conseguido el dinero se cree que se marcharon por el mismo sitio por el que habían entrado. El robo fue descubierto por los responsables del local anteayer, lunes, cuando se disponían a organizar la apertura del supermercado.
Entre el lunes y ayer los agentes de la Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía se encargaron de tomar huellas dactilares y buscar cualquier pista que pueda conducir hasta los autores de este nuevo robo. Por el momento no se han anunciado detenciones.
No es el primer robo de estas características que se produce esta temporada en la isla. El más grave de todos fue resuelto rápidamente por la Guardia Civil. Fue en el almacén que la empresa Logista tiene en la zona de Sant Jordi. Ocurrió el mes pasado. Los ladrones abrieron un agujero en el techo y lograron llevarse cigarrillos por valor de un millón de euros. La casualidad -un pequeño accidente de tráfico en Cullera- hizo que la Guardia Civil diera con los camiones en los que los ladrones ya habían sacado de la isla el tabaco robado. El resto del grupo fue detenido en la isla por los especialistas de la Guardia Civil.
En un principio se sospechó que este mismo grupo, al parecer también dedicado al tráfico de drogas, podría ser el mismo que robó en las oficinas de Correos en Sant Antoni, de donde se llevaron la caja fuerte al completo, que contenía unos 12.000 euros entre dinero en efectivo y sellos, pero finalmente no se imputó a nadie por este robo. En esta ocasión los ladrones abrieron un agujero en una claraboya del tejado del edificio, se descolgaron por un patio de luces y llegaron hasta las oficinas de Correos.
Sonó la alarma e incluso una patrulla de la Policía Local de Sant Antoni se acercó hasta el edificio, pero los agentes no escucharon ni vieron nada y se marcharon pensando que se trató de una falsa alarma.
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