La operación de la Guardia Civil que ha permitido desmantelar una importante red de traficantes de droga de nacionalidad británica que distribuí principalmente en el West End se ha saldado finalmente con 25 detenidos. Entre ellos figuran tanto los supuestos cabecillas de la banda como los últimos vendedores de la cadena de distribución. Las fuentes, cuando aún continuaban los recuentos, hablaban ayer de entre 20.000 y 23.000 éxtasis intervenidos junto con otras cantidades menos importantes de otras drogas.

Los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, en lo que se ha conocido como operación Trafalgar, apoyados por otras unidades orgánicas de instituto armado en Balears y de los puestos de Eivissa, se incautaron también de numerosos efectos y artículos que se cree procedentes del robo y con los que los consumidores pagaron las drogas, así como más de 100.000 euros en efectivo.

Registros

Durante los primeros compases de la investigación se llevaron a cabo un total de ocho registros. Al mediodía, con alguno de los detenidos se procedió al registro del Babylon, el bar de la calle Santa Agnès donde se supone se focalizaba la distribución de las drogas. Los detenidos fueron sorprendidos cuando dormían en viviendas de Sant Mateu, Sant Antoni, Santa Eulària y Sant Josep, casi todas casas enclavadas en zonas rurales.

Los investigadores, que llevaban más de un mes preparando la culminación de sus pesquisas, continuaban ayer interrogando a los sospechosos apresados para poder reflejar en el atestado que se presente en el juzgado el grado de responsabilidad de cada uno de ellos. Según las fuentes, varios de ellos eran conocidos ya por haber sido detenidos, o figurar sus nombres, en otras destacadas operaciones antidrogas que han tenido como marco la isla de Eivissa. Entre ellos, figuraba un implicado en un alijo de 1.500 kilos de hachís y uno de los empresarios arrestados recientemente en la actuación que este verano sirvió para acabar con la venta de popper en el West End.