Un hombre que trabajaba en una obra de la isla se sentó ayer en el banquillo bajo la acusación de haber agredido al encargado de los trabajos. La juez Martina Rodríguez, titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, dejó ayer el caso visto para sentencia.

El Ministerio Público solicita para el acusado, M.A.D., la pena de un año y medio de prisión por el presunto delito de lesiones y una multa de 4.500 euros por otro de injurias, ya que el hombre también está acusado por insultos al encargado, y una indemnización de 2.450 euros para la supuesta víctima.

Por su parte, el acusado dijo que no agredió al encargado, sino que en el calor de una disputa se agarraron y el jefe acabó de espaldas contra unaarmario metálico que tenía un filo cortante y se produjo un pequeño corte en el brazo.

También señaló el acusado que el encargado le insultó y añadió que los insultos por parte de este hombre hacia los subordinados eran una constante.

Al parecer, en el suelo del lugar, un barracón de obra que servía de oficina y también de almacén improvisado, había aceite, y el encargado se resbaló y se cayó al suelo.

En cualquier caso, las supuestas lesiones del denunciante fueron de carácter muy leve.

Ausencia

Dijo también que el encargado le lanzó dos puñetazos que él esquivó e insistió en que en ningún caso agredió al denunciante, que ayer no se presentó al juicio. La escena también fue vista por un compañero del acusado, que ayer declaró por videoconferencia y corroboró la versión expuesta ante la juez por su compañero.

Según se supo ayer en el juicio, los dos trabajadores acudieron a la oficina para echar en cara al encargado que el finiquito que habían cobrado de la empresa era menor de lo que ellos consideraban justo.