El juez decretó ayer el ingreso en prisión de un vecino de sa Penya supuestamente ligado a los clanes que controlan el tráfico de drogas en este barrio después de que fuera detenido por la policía al ser sorprendido en un pase. J.J.M.G., de 49 años y natural de la localidad granadina de Baza, sólo podrá recuperar su libertad, en espera de juicio, si deposita en el juzgado una fianza de 3.000 euros.
La cantidad intervenida al sospechoso no fue grande: un envoltorio con una sustancia pulverulenta, presuntamente cocaína, que entregaba a dos turistas a cambio de 60 euros.
Acto de venta
Fuentes judiciales recordaron al respecto que el Código Penal, en materia de legislación de drogas, establecía como delito, fijando penas notorias, no sólo el acto de vender cantidades importantes sino el mero hecho de comerciar con estupefacientes.
La detención del sospechoso la llevaron a cabo agentes del Grupo de estupefacientes del Cuerpo Nacional de Comisaría cuando se vigilaba la zona del Mercat Vell, en la Marina. Los policía vieron cómo J.J.M.G. contactaba con dos turistas y posteriormente se 'perdía' por sa Penya, yendo a la calle del Alto, para presuntamente recoger la papelina que fue intervenida.
Los agentes intervinieron cuando sus sospechas se confirmaron al ver al acusado cuando recibía un billete de 50 euros y otro de 10 y a cambio entregaba a sus clientes un pequeño envoltorio con la cocaína, droga que fue decomisada junto con el dinero.
Se da la circunstancia de que en los últimos días las fuerzas policiales de Vila han realizado al menos otros dos servicios similares en esta zona que se han saldado con la detención de otros dos sospechosos y la aprehensión de dinero y pequeñas cantidades de droga.
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