Una zodiac peina la zona donde nadaba el turista francés antes de que fuera dado por desaparecido | Marco Torres

Mucha inquietud sobre el paradero de Bahram Naraghi, un turista francés nacido hace 45 años en la capital iraní de Teherán. Eso es lo que se respiraba ayer en las inmediaciones de la torre de ses Portes, lugar donde los equipos de búsqueda, su novio y sus amistades, apoyados por helicópteros y embarcaciones neumáticas tratan de dar con él desde la tarde noche de anteayer. Se temía que las fuertes corrientes de la zona, especialmente la de Es Freus, hubieran traicionado la confianza del bañista, ataviado entonces con un pantalón corto tipo boxer de color azul.

Bahram Naraghi, un hombre de 1,80 metros de altura y que, según sus amigos, es un experto nadador fue visto por última vez sobre las cuatro de la tarde del martes, hora en la que se arrojó al agua en es Cavallet para bracear en dirección a la torre de ses Portes. Tres horas después la inquietud se apoderó de sus conocidos y poco después de las ocho y media de la tarde, según el 112, se puso en marcha el protocolo de búsqueda.

Un helicóptero de Salvamento Marítimo, el Helimer 201, rastreó exhaustivamente la costa de es Cavallet hasta avanzada la noche. Otros dos aparatos, ambos de la Guardia Civil, uno con base en Alicante y que estaba en Balears, se unieron durante el día de ayer a las tareas de rastreo. Agentes de los Grupos Especiales de Actividades Subacuáticas (Geas), junto con embarcaciones de socorristas y otros medios de Salvamento Marítimo continuaron durante la mañana de ayer los trabajos de rastreo, que se prolongaron durante la tarde. Los participantes en los equipos de búsqueda también trataron de hallar pistas sobre Naraghi, que estos días se alojaba con sus amigos en es Pujols, en las rocas al sopesarse que, en apuros y perdido, pudiera encontrarse herido o desvanecido en la zona de acantilados. Al cierre de esta edición, aún no había noticias sobre lo que le había podido ocurrir.