Prófugos. José Pereira Sousa, causante de la muerte de Abel, con su pareja, también desaparecida desde el suceso, en una imagen cedida por la familia de la víctima.

Abel Ureña Zafra, de 29 años de edad, falleció ayer a las diez de la mañana en la Policlínica Nuestra Señora del Rosario, en cuya unidad de cuidados intensivos se encontraba desde el 19 de agosto, cuando José Pereira Sousa le asestó un puñetazo en la mandíbula que finalmente ha resultado mortal.

Ambos eran empleados de Fiesta Hoteles, en concreto del Ushuaïa Beach Hotel. El primero era camarero y el segundo, uno de los responsables de la seguridad. Desde el primer momento, en Fiesta Hoteles aseguraron que se debió a una disputa «personal y en ningún caso profesional», una discusión en la que tuvo alguna relación la pareja del portero. Desde entonces, tanto él como ella están huidos. La joven podría ser acusada por complicidad en el caso de que se demuestre que le ha ayudado a huir, según fuentes judiciales.

El golpe mortal, con el puño izquierdo, quedó grabado y la cinta está en manos de la Guardia Civil y el juez, que decretó el secreto del sumario.

Fuentes conocedoras de la investigación aseguran que Sousa abandonó la isla al día siguiente del golpe que asestó a Ureña. Otras fuentes aseguran que aún se encuentra en la isla protegido por amistades.

Ayer, como luto por Ureña, Ushuaïa suspendió la fiesta que tenía prevista.

Mañana se hará la autopsia y el entierro será la próxima semana en Barcelona

Está previsto que mañana se le realice la autopsia y la semana que viene se celebre el entierro en Barcelona, localidad natal del fallecido. El padre de la víctima, José Ureña, dijo ayer el que viernes se advirtió una pequeña mejoría que finalmenete ayer se vio que no era real. José Ureña dijo que los propietarios de Fiesta Hoteles, con el exministro Abel Matutes a la cabeza, se han preocupado por ayudar en todo lo posible. Ayer, acudieron a despedir a Abel Ureña a la Policlínica Nuestra Señora del Rosario.