Conducía tranquilamente con su Renault Modus, un modelo de color crema, por la Avenida de Santa Eulària cuando una patrulla de la Policía Local de Eivissa lo interceptó. Así cayó en la madrugada de ayer el supuesto atracador de la librería de Santa Gertrudis que fue asaltada a cara descubierta anteayer tarde. La investigación de la Guardia Civil lo ha relacionado también con un robo similar ocurrido la semana pasada en Can Bellotera.

P.T.P, natural de Eivissa, al parecer vecino de Puig d'en Valls, y de 37 años, fue detenido poco antes de la una de la madrugada de ayer cuando, siete horas después del atraco en la librería Babia de Santa Gertrudis, circulaba en dirección al centro de Eivissa.

Todas las unidades policiales de la Isla, con los datos facilitados por la propia Guardia Civil, estaban alertadas no sólo de las características físicas del sospechoso sino también del vehículo en el que había huido tras producirse el robo en Santa Gertrudis.

El presunto ladrón, que se apoderó del dinero que había en la caja tras espetarle a la empleada que si no se lo daba la «iba a rajar», fue llevado posteriormente al puesto de Sant Antoni, lugar donde se continuaron las diligencias con el sospechoso y donde se confirmó su presunta implicación con el suceso ocurrido en Can Bellotera.

Asaltante

El asaltante de este robo actuó de un modo similar. A cara descubierta irrumpió en la librería Blau Press y se llevó un botín cercano a los 300 euros tras amedrentar a la empleada con un destornillador. La afectada fue agarrada y sufrió varios arañazos como consecuencia de la acción del ladrón. Éste se dio a la fuga con rapidez y fue visto dirigiéndose hacia el Club de Campo, sitio donde se cree había estacionado su coche.

La investigación policial determinó que la autoría de ambos robos debía corresponder a un mismo individuo, una persona que probablemente tenía problema con las drogas y que, tras un primer golpe exitoso, podría repetir este tipo de asaltos en otros establecimientos similares de la Isla.