La joven prostituta rumana que fue detenida tras acuchillar en la madrugada del pasado martes a un cliente en la cara en Vila quedó en libertad provisional en espera de un posible juicio que determine si actuó en legítima defensa o no. La mujer, una persona que no tenía ningún tipo de antecedentes y que reconoció a la Policía Local que había sido ella la que había herido a la víctima cuando temió por su integridad, volvió a manifestar en el juzgado que pasó miedo cuando, según su versión, fue agarrada fuertemente por el cuello.

Tras ello introdujo su mano en el bolso y salió una navaja de siete centímetros de hoja con la que rajó la cara del cliente. Dicha arma, como ya se informó, fue intervenida por los agentes locales cuando investigaban en el club donde trabajaba la joven lo que había ocurrido.

El juzgado también se encuentra al espera de tomar declaración al hombre que fue encontrado semiinconsciente, tras haber perdido mucha sangre, frente a la parada de taxis de la avenida Bartomeu Rosselló. Dicha persona tuvo que ser hospitalizada tras la agresión.

Fuentes judiciales explicaron que, de igual modo, antes de que se resuelva si el caso va a juicio deberán recibirse los informes que determinen la gravedad de las lesiones infringidas. Mientras tanto, la prostituta rumana tendrá que pasar cada quince días por el juzgado para estampar su firma.