El juicio poe este casi se celebró en Eivissa en Juzgado de lo Penal número 2. En la imagen, el edificio judicial. | ultimahora.es

Los magistrados de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial han rebajado la pena de dos años y medio de cárcel a diez meses al lituano residente en Alemania Regimantas Navaskauskas, condenado por matar en un accidente de tráfico a un joven motorista de 16 años de edad. Lo hizo el 22 de septiembre de 2002 en la carretera de Sant Josep, a más velocidad de la adecuada y adelantando en línea continua. La rebaja de la pena se debe a que la Sección Segunda de la Audiencia Provincial aprecia con mayor intensidad el atenuante de dilaciones indebidas, ya que el acusado tardó en ser juzgado casi diez años.

Los magistrados también han rebajado el tiempo que el lituano tendrá que permanecer sin carné de conducir. El Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa le impuso cuatro años, pero la Audiencia lo ha dejado también en diez meses.

En la sentencia se recuerda que «sobre la 1,20 horas de la madrugada, el acusado, sin observar la más mínima norma de atención y cuidado, y con desprecio absoluto de la velocidad aconsejada de 60 kilómetros por hora, tras efectuar un adelantamiento seguido a varios vehículos, y por ello a velocidad excesiva, se adentró a la altura del punto kilométrico 7,200, en un tramo curvo de visibilidad reducida señalizado debidamente con línea continua de prohibición de adelantar, por lo que perdió el control de su vehículo, colisionando frontalmente con el ciclomotor, que circulaba correctamente, en sentido Sant Josep-Eivissa y que era conducido por su propietario, que murió en el acto». Tenía 16 años de edad. En la parte de atrás del ciclomotor viajaba Laura Grüter, de 15 años, «que sufrió gravísimas lesiones consistentes en fractura vertebral y pélvica (...) y fractura de rama sacrolilíaca derecha que le ha producido una paraplejía, con necesidad de silla de ruedas permanente».

En su escrito de acusación, el ministerio público acusó a Regimantas Navakauskas por los delitos de homicidio por imprudencia grave y otro de lesiones por imprudencia, y solicitó un total de tres años de cárcel y cuatro años sin carné de conducir.

Por su parte, la acusación particular reclamó por los mismos delitos y pidió por el primero de ellos la pena de cuatro años y otros tres por el segundo, así como la retirada del carné de conducir por un periodo de ocho años, cinco por el homicidio y tres por las lesiones.