El 'Eibici', el servicio de préstamo de bicicletas que impulsa el Ayuntamiento de Vila, podrá ser usado hasta por 1.500 personas durante una hora si las previsiones se cumplen. Estas previsiones son 20 minutos de periodo estimado de uso, ya que según el concejal de Movilidad, Juan Rubio, el servicio está pensado para las «cortas distancias» que hay en el municipio y 500 bicicletas en la calle. Estas cifras supondrían, en caso de que todos los vehículos estuviesen ocupados que 1.500 personas podrían recorrer en bicicleta las calles de Vila durante una hora.
En comparación con otros lugares, los servicios municipales de préstamo de bicicletas tienen sus particularidades, según el territorio. Uno de los más llamativos el del municipio de San Joan d'Alacant (Alicante) donde el usuario puede alejarse hasta 3 km de la localidad.
Así las cosas, en Barcelona (el servicio conocido como 'bicing') el préstamo se prolonga hasta las dos horas al igual que en Castellón (bicicas), en Pamplona (Nbicis) es de cuatro horas y en Sant Joan d'Alacant (Alicante) el servicio se prolonga hasta la hora y media.
Según el pliego de condiciones el precio orientativo para el uso de las bicicletas será de 35 euros para los bonos anuales mientras que existirán bonos temporales de 6 euros para tres días y 12 euros para siete días. Además, en caso de ser usuario ocasional, existirá la posibilidad de pagar 0,30 euros por cada media hora, con un máximo de dos horas, con la primera fracción gratuita. En caso de superar estas dos horas de tiempo máximo se impondrán penalizaciones de cinco euros por cada hora.
Teléfono gratuito
Por otro lado, y según la documentación para la adjudicación de este servicio, se insta a las empresas que concurran al concurso a tener un local donde se lleven a cabo las reparaciones de los vehículos así como la limpieza. Además, también la empresa adjudicataria deberá contar con una oficina desde donde se regule todo el servicio municipal de préstamo de bicicletas así como la instalación de una línea telefónica gratuita de atención al usuario.
El tiempo previsto de este contrato será de 10 años, con las reservas correspondientes para restringir este compromiso, y se obliga a la empresa a sustituir todo el parque móvil a los 5 años de explotación, tiempo estimativo de la vida útil de las bicicletas. Además, la adjudicataria también será la responsable del mantenimiento, reparación y limpieza semanal de todos los vehículos que se pongan en la calle, así como de realizar la distribución equitativa de las mismas en todas las estaciones bases.
En total se prevé que se pongan en la calle un total de 500 bicicletas repartidas en 50 estaciones bases. En comparación con otras ciudades en Barcelona hay 6.000 vehículos repartidos en 400 estaciones, en Pamplona más de 400 bicicletas con una veintena de estaciones aparca bicis, en Castellón 280 bicicletas con 38 estaciones o en el caso de Sant Joan d'Alacant 70 bicicletas con cinco puntos de retirada.
El modo de usar la bicicletas se hará a través de un sistema magnético que permita desenganchar el vehículo del aparcamiento una vez que el usuario se identifique con la tarjeta correspondiente. En lugares como Palencia o Sant Joan d'Alacant el sistema de retirada se hace a través de un mensaje móvil a una central de control.
Usuarios de más de 1,5 metros de altura
En el pliego de condiciones, al igual que en el resto de ciudades, se establece que los usuarios deberán ser mayores de edad y en caso de no superar los 18 años tendrán que estar acompañados por un adulto. Además, los usuarios deberán tener una altura de entre 1,5 y 2 metros, requisito para utilizar el servicio. Además se establece todo un reglamento de normas de uso con sus correspondientes sanciones en caso de incumplimiento. Estas penalizaciones pueden suponer multas de hasta 1.000 euros en caso de cometer una falta muy grave.
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