Jaime del Burgo y Telma Ortiz. | Efe

El pasado 21 de noviembre Jaime Peñafiel lanzó Letizia y yo. Este trabajo, que en un primer momento había pasado desapercibido, estos días ha cobrado especial importancia al salir a la luz las declaraciones que hace Jaime del Burgo al periodista a lo largo de las 240 páginas del libro. «Descubre los grandes secretos de la reina Letizia. ¿Guarda un polémico pasado oculto? ¿Podría repercutir sobre su vida presente? ¿Realmente conocemos quién es nuestra consorte más allá de sus celebrados estilismos y su buena oratoria?»: con estas preguntas Peñafiel promociona uno de sus trabajos más polémicos por las supuestas revelaciones que hace de la mujer de Felipe VI.

Para escribir este texto el colaborador televisivo ha recurrido a del Burgo, exmarido de Telma Ortiz. El excuñado de doña Letizia habla en primera persona en algunos de los capítulos donde explica que ha sido una pieza clave en la Casa Real y remarca su buena relación con el rey Juan Carlos I. Pero lo más llamativo es que Jaime del Burgo asegura que mantuvo un «romance» con la reina Letizia: «La mafia institucional no sabía de un amor que nació en Venecia antes del año 2000. Nos buscábamos como una solución alternativa que casi llegó a funcionar».

El abogado explica a través de Peñafiel que, tras la boda de los entonces Príncipes de Asturias, forjó «una gran amistad» con Felipe VI. Es más, según su versión, ellos le invitaban a pasar las vacaciones en Baqueira y Marivent. Precisamente en un verano en Mallorca vivió su momento de más tensión con la Reina: «En agosto de 2011 fue la única vez que discutimos Letizia y yo. En Marivent. Y en noviembre de ese año, encontrándome en Londres, recibí una llamada. Fue muy breve: 'No podemos seguir viéndonos'. Y colgó». Tan solo un año después Jaime del Burgo y Telma Ortiz pasaban por el altar en un breve matrimonio que duró cuatro años.

La Casa Real ha optado por guardar silencio al respecto aunque del Burgo indica que durante estos años hasta ha sido perseguido: «Por mis conocimientos, el CNI comenzó a seguirme y estuvieron en ello durante cerca de cinco años. En una ocasión, se extralimitaron y me desvalijaron un palacete donde vivía a las afueras de Ginebra. Buscaban lo que no estaba en casa». Por su parte Peñafiel da total credibilidad al exmarido de Telma: «Es un hombre importante en la existencia vital sentimental de la reina».