La cantante y presentadora Leticia Sabater acudió este pasado miércoles al plató de telvisión del programa ‘Y ahora Sonsoles’. Durante el programa Sabater hizo varias confesiones sobre su vida personal que han dejado a muchos de sus seguidores perplejos.

Leticia Sabater, nacida en Barcelona en 1966, explicó en el plató que siempre ha sido la «oveja negra» de su familia. Y es que, además de estar emparentada con los Bordiú, Sabater asegura que en los inicios de su carrera como cantante su familia no la apoyaba en este aspecto, «he estado dos años sin hablarme con mi padre, y eso la gente no lo sabe», y añadía que «nunca he tirado de mi familia para conseguir nada».

Respecto a su niñez, la cantante confesaba entre lágrimas que al nacer «era una niña muy fea». Según explicó este pasado miércoles en el programa ‘Y ahora Sonsoles’, ''cuando nací lo primero que pasó es que mi abuelo dijo ''esta niña no tiene solución'' porque era tremendamente fea. Además, nací con una deshidratación de píloro que hace que prácticamente nazcas muerta. Y mi madre a base de biberones fue fortaleciéndome''.

Después de comprender y de ver con sus propios ojos la admiración de los fans hacia Leticia Sabater, la familia de la catalana comprendió que todo ello había sido fruto de su trabajo y constancia.