ROS CASARES 68 SAN JOSÉ 66 ROS CASARES (19+17+21+11): Palau (5), Milton (13), Tornikidou (16), De Souza (8), Douglas (18) "cinco inicial" Maltsi (-), Jordana (0), Aguilar (6), Bjelica (-) y Ferragut (2).

CB SAN JOSÉ (19+16+20+11): Feaster (11), Cohen (12), Revuelto (11), Lima (12), Page (10) "cinco inicial" Pascua (5), Seguí (2) y Gómez (3).
Àrbitros: Morales y Bravo. Sin eliminadas.
Incidencias: Pabellón de San Pablo. Unos 3.000 espectadores. El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, entregó la Copa a la capitana valenciana, Elisa Aguilar.

Naia Fernández
Brillante final de la Copa de la Reina la que protagonizaron Ciudad Ros Casares y San José de León ayer en el Pabellón San Pablo de Sevilla. Dos equipos que se olvidaron del juego rácano habitual en otras finales y se lanzaron al ataque a tumba abierta en un choque que tuvo emoción hasta el último segundo.

El choque arrancó con un ritmo trepidante y con el técnico del San José mostrando claramente sus cartas. Defensa en zona 2-3 tras canasta e individual tras fallo. La única que hizo una buena lectura de esa defensa en el Ros Casares fue Elena Tornikidou que cerró el primer cuarto con 10 puntos.

La duda era cuánto tiempo podrían aguantar ese ritmo ambos equipos y la fiesta duró 40 minutos. El entrenador de las valencianas, Manolo Real, metió en cancha a Elisa Aguilar en lugar de Palau y las taronjas ganaron en amenaza exterior. Dos triples de la capitana del Ros Casares parecían abrir una mínima brecha de 5 puntos pero todo era un espejismo. El conjunto levantino, verdugo del PDV en las semifinales, no lo iba a tener fácil.

El ritmo era trepidante y por momentos Douglas reclamaba su protagonismo. Si no era la alero norteamericana era Tornikidou la que anotaba para poner a las suyas en rentas que rondaban los 6-8 puntos. El San José no bajaba los brazos y un triple de Anna Gómez ponía en jaque al Ros con el 57-55 al término del tercer parcial.

Emoción, buen juego, no se le podía pedir más a esta final. Las equivocaciones se multiplicaban y pesaban más en el conjunto castellano leonés que veía como una canasta de Tornikidou colocaba un peligroso 68-60 en el luminoso a falta de dos minutos y medio. Pero el San José no renunciaba. Los tiros libres de Pascua y Cohen y un triple a tablero de la israelí daban esperanza al León a falta de 37 segundos. Tornikidou falló en su lanzamiento y el balón era para las leonesas, que tuvieron su oportunidad en manos de Cohen. La base israelí intentó una prenetración sobre la bocina pero falló el tiro. La Copa de la Reina era otra vez para el Ros Casares.