Un atasco inesperado

Atrás quedó ya esa etapa en la que el Gasi batallaba en Segunda División y el equipo peñista, en Segunda B. Ahora, la mayor categoría de un equipo pitiuso sénior se encuentra en el grupo balear de Tercera División y los resultados no son tan esperanzadores como se esperaba.

Las sorpresas

Que el Gasifred y la Peña estén abajo en lugar de arriba es, para muchos, algo totalmente inesperado. Los propios técnicos lo reconocen y se escudan, en parte, en la labor arbitral. Carlos Gómez, entrenador azulino, comentó que su equipo «merece estar más arriba». «Sin embargo, nos hemos encontrado con varios inconvenientes para viajar a Palma. Hasta tres jugadores no pueden desplazarse por motivos laborales. Si a eso le sumas alguna lesión o sanción, eso hace que baje el nivel del equipo», explicó el míster, que indicó lo siguiente sobre los árbitros: «El pasado fin de semana nos pitaron dos dobles penaltis rigurosos que influyeron en el marcador. Y esto es así cada vez que vamos a Palma. De hecho, solamente hemos ganado un partido fuera y fue en Formentera».

Un discurso similar siguió Rafa Angulo, preparador peñista: «Nosotros deberíamos tener ahora mismo 10 o 12 puntos más, por lo que estaríamos segundos. No hay ningún partido con dos o tres jugadas determinantes que te perjudiquen». El técnico de los de Santa Eulària no ocultó que se esperaba más de su escuadra y argumentó que otra de las razones, además de la arbitral, es el nivel de los rivales: «Los equipos mallorquines se reforzaron bien. Hay equipos que no entraban en las quinielas como el Montesión o el Son Oliva, con el que debutó un profesional italiano ante nosotros el pasado fin de semana. No contábamos con que hubieran tantos equipos de nivel. Hoy en día te gana cualquiera».

Dudú y Sergio Nieto, técnicos del Formentera y del Can Bonet, respectivamente, también están sorprendidos con la marcha del Gasifred y de la Peña. «Tienen plantillas muy buenas, con jugadores que conocen la categoría. No pueden estar ahí abajo. Ni hablar. Es muy raro», dijo el brasileño. Para el preparador de los de Sant Antoni también es «raro» verlos ahí. «Si estamos todos abajo es porque algo no hacemos bien», agregó.

También es raro que el Racing Formentera esté abajo, según Angulo: «Tiene tres jugadores de Palma, con buen nivel, y lo entrena Dudú. Quién iba a decir que estaría abajo. Le ha pasado tres cuartas partes de lo mismo que a nosotros».

La cantera, crucial

Para que el futuro del fútbol sala mejore, prácticamente todos están de acuerdo en que el trabajo de cantera es crucial. Esta temporada han renacido las competiciones federadas en categorías base, inexistentes durante los últimos años. Actualmente hay 40 equipos participando desde prebenjamines hasta juveniles, por lo que hay alrededor de 400 practicantes de fútbol sala.

Angulo señaló que «es, sin duda, uno de los motivos» de que el fútbol sala pitiuso esté como está y lamentó que «ni siquiera hay una liga regional para tirar del filial». «Nosotros teníamos uno y se han tenido que ir a jugar la Liga de ses Figueretes», agregó. Carlos Gómez va más allá y lamenta que el problema está en «cómo se ve el fútbol sala en Eivissa con las categorías inferiores». «Es como si fuera el hermano pequeño del fútbol, un segundón al que hasta ahora solo iban los que no tenían suerte en el fútbol», explicó.

Nieto piensa que «se dejó pasar una gran oportunidad para aprovechar el tirón del fútbol sala cuando el Gasifred estaba en Segunda y la Peña, en Segunda B, pero se prefirió invertir dinero en gente de fuera y no en formar a los chavales. Ahora se pagan las consecuencias». Dudú es el único que discrepa de todo esto: «No creo que la marcha actual de los séniors sea por la cantera. Todavía hay gente de nivel como Ernesto, Clayton... No creo que sea un problema de cantera».