José Luis fue un jugador clave en la tarde de ayer.

PEÑA DEPORTIVA: 2

PENYA CIUTADELLA: 1

La Peña Deportiva prolongó su buena racha a costa de una Penya Ciutadella notablemente perjudicada por las decisiones arbitrales. Los de Santa Eulària se llevaron el gato al agua gracias a un salvador gol de Kevin en el último minuto después de que al conjunto ‘ciutadellenc’ le anularan un gol legal y no le permitieran jugar en superioridad numérica al no expulsar a Rosa, en la primera parte. Incluso Torres también podría haber visto la roja en la acción del penalti que supuso el 1-1. Pero el fútbol es así. Los árbitros te dan y te quitan a lo largo del curso y, ayer, la cruz de la moneda le tocó sentirla en sus carnes a los menorquines.

Los visitantes no pasaron apuros prácticamente nunca hasta que entró José Carlos en la segunda mitad. El extremo hispalense le dio otro aire al ataque peñista y fruto de su calidad se adelantó el conjunto de Mario Ormaechea. Antes, en el primer tiempo, la Penya Ciutadella, con una línea de cinco defensas y Zurbano peleando contra el mundo en la punta de la lanza, se mostró inexpugnable atrás y peligroso en sus ataques. De hecho, no tardó ni cinco minutos en poner a prueba a Torres, que realizó un paradón para evitar el primer tanto de la tarde. La única llegada de los locales fue anulada y había acabado en gol de Piquero de cabeza a los 23 minutos.

La Peña sufrió especialmente en la recta final de este primer acto. Respiró cuando el trencilla castigó sólo con amarilla una entrada de Rosa como último defensor cuando Sales, tras un gran pase interior de Zurbano, se disponía a encarar al portero. Luego, el tanque azulón disparó fuera desde la frontal a la media vuelta. Por último, José, escorado en el área pequeña, tampoco encontró portería en la última acción remarcable antes del descanso.

En el segundo tiempo, José Carlos, que entró en el minuto 54 por Vicent, se encargó de cambiar el decorado. Primero, en una acción marca de la casa en la que se marchó de quien se cruzó en su camino por la banda derecha, mandó un centro a Ramiro que éste no supo definir. Poco después, los papeles se intercambiaron. Ramiro centró desde la izquierda y el andaluz rompió el balón de volea para estrenar el marcador. Impresionante. La Peña pudo sentenciar el encuentro en el minuto 71. De nuevo José Carlos armó el taco, pero Baena no supo rematar la faena.

Un final de infarto

Cuando mejor estaba el cuadro local, llegó el jarro de agua fría. A Torres se le escapó el balón de las manos tras no medir bien su salida y arrolló a Manolo en el área cuando éste lo tenía todo a favor para marcar. El guardameta vio la amarilla –los visitantes reclamaron roja– y Zurbano no perdonó desde los 11 metros.

En el siguiente ataque de los menorquines se produjo una acción similar. El portero local volvió a perder la pelota y Pule marcó a puerta vacía. Sorprendentemente, el árbitro pitó falta a favor de los peñistas, que aprovecharon el regalo a continuación. José Luis peleó hasta la extenuación por el balón, consiguió abrir a la derecha y Baena centró para que Kevin, en línea de gol, subiera un inesperado 2-1 al tanteador. Los ‘ciutadellencs’ no se lo creían, pero la realidad es que los puntos se quedaron en Santa Eulària.