Entrevista a Robert Pirès. TEF - Televisió d'Eivissa i Formentera | Youtube: Televisió d'Eivissa i Formentera

Robert Pirès (Reims, Francia, 29-10-1973) trasladó su residencia a Ibiza hace apenas un trimestre y se ha vinculado a la Peña Deportiva, donde forma parte del cuerpo técnico del primer equipo. El francés, campeón del mundo con su selección en 1998 y también de la Eurocopa’00, mostró su lado más humilde al recordar que él comenzó en campos como el de Santa Eulària y que vive el objetivo de la permanencia en la categoría de bronce del fútbol español con la misma intensidad que la pelea, en su día, por ganar la Premier League. El exfutbolista, cercano y amable, desveló también que el partido que nunca olvida es el de la derrota sufrida en la final de la Liga de Campeones contra el FC Barcelona en 2006, cuando defendía la camiseta del Arsenal.

—¿Cómo se está sintiendo en su nuevo club, la Peña Deportiva?
—Me siento muy bien porque veo que la Peña Deportiva es un poco como una familia y por eso me siento muy cómodo. Desde hace dos meses, tengo buena relación, sobre todo, con Raúl [Casañ], que me ha abierto las puertas de este campo, y también con los jugadores, que para mí es importante tener esa relación que yo ya he tenido muchos años. Ahora que me he retirado, estoy con ellos ayudando al equipo y a ver a dónde se puede llegar.

—Usted es una persona acostumbrada a estar en grandes estadios como el Emirates Stadium. Ahora, hace vida en un campo mucho más pequeño y modesto. ¿Cómo es el cambio?
—Es un cambio, pero, al final, lo más importante es el fútbol. Que haya césped artificial no importa. Lo que cambia es lo que tienes alrededor, pero para mí significa mucho estar aquí y poder jugar con el primer equipo entrenando con ellos. La gente tiene que saber que, cuando yo tenía 12 o 13 años, empecé en un campo como este. La suerte es que llegué a alto nivel, pero para eso hay que trabajar. No puedo olvidar dónde empecé.

—Un día, usted apareció por la grada y Raúl Gómez le vio. Él había jugado en el Villarreal B cuando usted estaba en el primer equipo y le reconoció. La pregunta es si usted sabía quién era Raúl Gómez.
—Yo lo sabía porque entrené varias veces con él. Él estaba en el filial y yo con el primer equipo. Cada miércoles, lo que hacía Manuel Pellegrini era un equipo entre las dos partes y claro que me acuerdo. Cuando supe que estaba aquí, me ayudó mucho en la incorporación. Me presentó a Raúl Casañ. Estuvimos hablando y le dije que lo que estaba haciendo en el Arsenal, si él quería, lo podía hacer aquí para ayudar. Me dijo que sí y ahora estoy aquí con vosotros y con él hablando de la Peña Deportiva.

—La sorpresa no es solamente que se le viera en este campo. La sorpresa realmente es que eligiera la isla como destino para vivir. ¿Por qué Ibiza?
—Simplemente, he disfrutado mucho tiempo en Londres y lo que ha pasado con el brexit ha cambiado un poco la mentalidad de los ingleses y la atmósfera. En la familia, hablamos de cambiar y lo hicimos. Encontrar una ciudad no es fácil, pero creo que Ibiza tiene todo: calidad, sol… Ahora lo que estoy sintiendo es que la gente es muy cariñosa conmigo. Además, yo también soy español. Mi madre es española, de Oviedo, y entonces tengo eso en la sangre. También mi estancia en Villarreal fue positiva. Estar en Ibiza es un sueño.

—Si yo estuviera en su situación y llegase a una nueva ciudad, me imagino buscando en Google campos y clubes. ¿Cómo dio usted con este escenario y por qué eligió la Peña?
—La primera cosa al venir a Ibiza era encontrar un colegio inglés. La suerte es que Ibiza lo tiene. Tiene uno inglés y otro francés. Elegimos el inglés para que los niños sigan aprendiendo ese idioma. Ahora, están también aprendiendo español. ¿Por qué la Peña? Tengo un amigo que vive aquí y trabaja en el club. Se llama Luca. Le dije: «Tengo dos niños que quieren jugar al fútbol. ¿Dónde los puedo apuntar?». Me dijo que el mejor club de Ibiza es la Peña Deportiva. Tuvimos una reunión y ahí empezó la conexión.

—El primer equipo encadena dos victorias consecutivas. ¿Cree que conseguirá su objetivo?
—Lo veo con muchas ganas, mucha capacidad y mucha calidad. Está en buena racha. Ahora, hay que seguir y trabajar. El objetivo es llegar lo más alto posible y a ver qué pasa. Faltan pocos partidos y complicados, como el del domingo, que es otra final. Hay que preparar muy bien este partido como se hizo contra el Hércules, por ejemplo, aquí en casa. Fue complicado pero se ganó. Con este trabajo y mentalidad, van a llegar lo más arriba posible en la clasificación.

Feliz. Robert Pirès vive con alegría su nueva vida en la isla y ya se siente uno más en la Peña Deportiva.

Robert Pirès vive con alegría su nueva vida en la isla y ya se siente uno más en la Peña Deportiva. Foto: Marcelo Sastre.

—¿Cómo vive el cambio de luchar por la Premier League a pelear por un objetivo más humilde en la Segunda B de España? ¿Lo hace con el mismo sentimiento?
—Claro que tengo el mismo sentimiento porque, al final, estamos hablando de fútbol. Para mí, lo más importante es estar en el campo. Ahora, eso se acabó y estoy fuera del campo, pero, con lo que he vivido, si puedo ayudar al equipo y a algunos jugadores pues lo voy a hacer porque tengo muchas ganas. Lo que pienso es que un club como la Peña se merece jugar a alto nivel.

—El equipo está yendo de menos a más. Si se consigue el objetivo, ¿lo va a celebrar como un Mundial?
—Como un Mundial no lo sé. Hay que preparar y jugar cada partido. El del domingo contra el Orihuela es otra final. Hay que seguir con esta buena racha. Lo que le he dicho a Raúl [Casañ] y él lo sabe es que lo más importante son los partidos porque ahí se ve lo que pasa, pero también lo que pasa en la semana. Y yo veo cómo trabajan durante la semana y los jugadores lo hacen muy bien. Ahora, ya están ahí metidos. Saben que tienen un objetivo y ojalá lo consigan.

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—En aquella final, Francia, con usted en sus filas, tumbó a la Brasil de Ronaldo, Ronaldo, Bebeto, Roberto Carlos, Cafú... ¿Qué recuerda de aquel partido?
—Ya sabes lo que voy a contestar. Los recuerdos son fenomenales, sobre todo los que tengo con la selección francesa, en París, frente al mejor equipo del mundo, que se llamaba Brasil. Pero lo que quiero decir es que, a un partido, puedes ganar a cualquiera. Si estás con esa mentalidad, si cada uno trabaja para el equipo y para el compañero, creo que se puede conseguir lo que quieras. Esta es la mentalidad que deben tener todos los jugadores de la Peña y hoy la tienen, por eso estoy muy contento de lo que están haciendo.

—Dos años después, en 2000, usted y Francia ganan también la Eurocopa. En cuartos, eliminaron a España por 2-1 en un partido recordado por el penalti fallado por Raúl en el último minuto. Aquí eso fue duro.
—Gracias, Raúl, que falló (risas). Ya sé que los españoles guardan mal recuerdo de este partido. Ha sido uno de los más complicados. También lo fue el de semifinales contra Portugal, pero, si quieres ganar un Mundial o una Eurocopa, en algún momento necesitas calidad y también que la suerte esté de tu parte. En ese partido contra España, tuvimos mucha suerte y por eso seguimos adelante y, al final, ganamos.

—¿Qué selección cree que tiene más opciones de alzarse con la Eurocopa este año?
—Yo creo que hay varios equipos que pueden levantar el trofeo. Te voy a decir Francia, que es normal porque soy francés y siempre voy con mi país, pero creo que hay buenos equipos como Inglaterra, Bélgica... España también va a tener un buen equipo. A ver qué pasa, pero lo más importantes es ver buen fútbol.

—Continuando un poco con su experiencia como futbolista, ¿cuál es el mejor jugador con el que ha compartido equipo y contra el que se ha enfrentado?
—Es complicado. Hay muchos. Tuve la suerte de estar con ellos cada día y aprendí muchas cosas. Para mí, uno de los mejores es Zinedine Zidane. Ha sido un placer y una suerte estar con él en la selección. Ganamos los dos títulos más importantes para nuestro país. También están Thierry Henry, Dennis Bergkamp, Riquelme... Y el más complicado para mí fue Gary Neville, del Manchester United.

—En el eterno debate sobre quién es el mejor futbolista de la historia, ¿cuál es su opinión?
—Yo creo que es complicado decir un jugador. Para mí, es imposible. Tuvimos a Zidane, Ronaldinho, Ronaldo... Hay un montón. Hoy tenemos a Messi, Cristiano, Mbappe, Haaland... Creo que tenemos que disfrutar de estos jugadores cuando están en el campo jugando.

—Y a nivel colectivo, ¿qué equipo o selección le ha fascinado tanto como para pensar que era invencible?
—Yo creo que en un momento dado el Barcelona tenía un equipazo, con mucha calidad. Se hablaba de Messi, pero, para mí, uno de los mejores futbolistas y español ha sido Andrés Iniesta. A mí me encanta más este tipo de jugador, porque maneja muy bien el balón, tiene buena visión, puede marcar goles, te puede dar muchas asistencias... Por eso, cada vez que nos enfrentamos contra este Barcelona ha sido muy complicado.

—Habla de Iniesta y, justo esta temporada, ha explotado un joven al que ya se compara con él: Pedri. ¿Cree que es parecido o son palabras mayores?
—Puede ser igual que Iniesta. Tiene esa calidad con el balón, pero cuidado porque es muy joven y tiene que trabajar y aprender. Va a fallar cosas, peso no pasa nada. Ahora, el Barça y el entrenador le tienen que ayudar. Ya se nota que tiene algo, pero hay que tener paciencia con él.

—¿Cuál es el partido que nunca olvidará?
—La final de Champions contra el Barça en 2006, en la que perdí con el Arsenal. Llegar a una final de la Champions es muy complicado, pero, cuando estás ahí, quieres ganar. Esa noche, en París, fue muy difícil. El Barça tenía un buen equipo. Perdimos 2-1 y por eso no puedo olvidar ese partido.

—Ahora mismo, está en el cuerpo técnico de la Peña Deportiva y también colabora en medios de comunicación. ¿Pero por dónde pasa su futuro? ¿Se plantea ser entrenador?
—Por el momento, sinceramente, no me planteo ser entrenador. Ya sé que es difícil en cada nivel, sea en Segunda División B o en Primera División. Es un trabajo muy complicado y muy bueno, pero, al final, te molesta mucho porque tienes que pensar en todo. Por eso, no lo quiero por el momento. Lo más importante es disfrutar de la calidad de vida aquí en Ibiza, de tener la posibilidad de estar aquí en la Peña y ayudar a los jugadores. Por ahora, estoy tranquilo y quiero disfrutar de la familia aquí.