En busca de un futuro

La ya exjugadora del Sant Jordi se ofreció en el mercado futbolístico nacional y encontró dos opciones, tal y como ella reveló ayer: «Como yo quería jugar a fútbol 11, que es lo que siempre he querido, empecé a buscarme las habichuelas yo sola, envié currículums y entablé contactos. En Las Rozas me llamaron para unas pruebas, pero el Torre del Mar me ofreció directamente la ficha sin periodo de prueba, así que voy a pasar la temporada allí».

Díaz pudo dar el salto a la Península antes, en concreto hace un par de campañas, pero prefirió permanecer en casa: «Un equipo de Primera División de Melilla de fútbol sala me quería, pero no fui por la lejanía y el hecho de tener mi vida aquí. Además, yo soy jugadora de fútbol 11. Me habría gustado la experiencia, pero no podía irme hasta allí».

Naiara quiere ir a más y por eso se ha decantado por probar fortuna con el Torre del Mar: «El fútbol es mi meta y por eso mismo me voy a un equipo de fuera, porque aquí se complica mucho para tener salida. Al final, estamos en una isla y todo es un poquito más difícil que si estuviera en la Península. Yo tenía esto como un hobby, pero me va gustando cada vez más y voy a probar si realmente es un hobby o si puedo llegar a vivir de ello. Al menos, voy a intentarlo».

Con el Sant Jordi, la jugadora consiguió el trofeo de la liga insular y el trofeo a la máxima goleadora. Lo primero no le sorprendió porque «solemos conseguir lo que nos proponemos, más si lo hacemos en piña todas juntas». Sí que le sorprendió el premio pichichi: «No me lo esperaba, pero empecé la liga con el objetivo de destacar y lo he conseguido. Normalmente, siempre que me propongo algo, hago lo necesario para conseguirlo».