España ha superado este martes en Can Misses a la selección de China (3-0). El segundo y último partido que ha jugado la selección femenina en su concentración en la isla ha tenido de todo. Ha sido un choque divertido que ha hecho vibrar a los más de 3.000 espectadores que se dieron cita en las gradas. Tere, en la primera parte, y Athenea y Alba Redondo, en la segunda, han sido las solistas, de una orquesta dirigida por una magistral Jenni Hermoso.
China salió mejor y con un juego veloz y vertical generó los primeros problemas a la defensa española que sufría con la presión. Eso sí las llegadas no se traducían en remates certeros. Can Misses notaba los problemas e intentaba animar al combinado femenino con gritos de «España, España».
El primer gran acercamiento de España llegó en el minuto 14, cuando Hermoso controló de espaldas y cedió el balón para Athenea que en una buena posición disparó desviado. Parecía que se quería animar el equipo de Jorge Vilda.
Entró entonces el partido en una fase de igualdad en la que España tenía el balón y China intentaba ponerle velocidad cuando robaba. Jenni Hermoso que empezaba a sentar cátedra estuvo a punto de sorprender a Xu Huan con un disparo desde la frontal que tocó en una defensora y terminó desviando la guardameta con apuros a saque de esquina. En el córner el remate de Ivana se iba por encima del larguero. Corría el minuto 24.
En el 28, llegaba la ocasión del partido con un gran disparo de Olga Carmona que se encontraba con una mejor para de Xu Huan. Acto seguido la portera estuvo a punto de pasara de heroína a villana. Todo lo bien que lo había hecho en la jugada anterior, lo hizo de mal en la salida a un centro lateral. Se comió el balón y Esther González remató a placer. Se venía el primero, pero Zhang Rui lo evitó bajo palos.
Un minuto más tarde era Misa Rodríguez la que volaba para evitar el tanto de Zhang Linyan. Gran contra de las chinas que la finalizaron con un muy buen disparo. Se había animado el partido y en el 38 se salvaba España. Wurigumula peinó el balón en el corazón del área y se fue lamiendo el palo de una Misa que ya estaba completamente superada.
Parecía que el partido se marcharía sin goles al descanso, pero en la última jugada de la primera parte, Teresa Abelleira se sacó un magnífico disparo desde la frontal del área que tras tocar en el palo acabó en el fondo de la red.
En la segunda parte, China salió mucho más enchufada y las primeras llegadas fueron suyas, especialmente peligrosa fue la de Zhang Linyan, la mejor de las asiáticas, que recortó con maestría y probó a Misa que estuvo firme para evitar el gol con una parada que acabó en saque de esquina.
Tras estas primeras llegadas de las chinas, fue España la que tuvo dos buenas opciones, una por cada banda, pero con idéntico resultado. El balón se paseó por el área sin encontrar rematador. Posteriormente, en un saque de esquina, Esther remató, la portera despejó y volvió a ganar la partida también a Jenni Hermoso en el rechace. España estaba desbocada y Athenea hizo el segundo en una bonita acción personal. 2-0, minuto
En la grada, mientras tanto, el público disfrutaba. La ola recorría el estadio y hacía vibrar Can Misses con un público ávido de alegrías en una temporada nefasta para el fútbol de Vila. En la banda, Vilda iba haciendo cambios; y en el campo España buscaba el tercero.
Y este llegó en el minuto 81. En un saque de esquina, el balón voló al segundo palo, donde Alba Redondo que había entrado hacía unos minutos cabeceó picado al palo contrario para superar a Xu Huan y dar una nueva alegría al público asistente.
En el tramo final, España lo siguió intentando, pero ya no llegaron más goles. Lo más destacado fue la sonora ovación que se llevo Jenni Hermoso al ser sustituida después de dar una lección de fútbol. La 10 hizo honor al dorsal con un sinfín de detalles técnicos, siendo la mejor de un partido que ya no vería más goles.
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