La victoria ante el Antequera confirma el gran momento de forma de un conjunto que sólo ha perdido un partido esta temporada y que suma 17 puntos de los últimos 21 en juego. Siete jornadas sin perder y cinco sin encajar ni un solo gol, desde el 12 de noviembre. Este dato es un nuevo récord en la corta historia de la categoría y también es la mayor racha vigente de las tres máximas categorías del fútbol español. El Burgos, en Segunda, encadena cuatro.
Otro dato muy destacable de estas primeras 17 jornadas es que los celestes son el mejor visitante. Aunque lejos de Can Misses su juego se ensombrece, la realidad es que los ibicencos presentan mejores números como visitante que como local. Es cierto que también ha jugado un partido más a domicilio, pero son 21 puntos fuera de casa por los 19 que se han logrado en Can Misses. Además, fuera de la isla no se ha perdido ni un solo encuentro, son seis victorias y tres empates. En casa son seis victorias, un empate y una derrota. En definitiva, una regularidad que llama y mucho al optimismo.
Goles repartidos
También es muy importante, en contra de lo que pueda parecer, que la Udé no tiene un hombre gol del que dependa su ofensiva. En la escuadra pitiusa las dianas se reparten y una competición tan larga en la que puede y suele haber lesiones eso termina siendo una ventaja. En las filas celestes Gallar, Soko y Obolskii suman cinco goles cada uno, Eugeni atesora cuatro, Escassi, tres, y le siguen Fausto Tienza, Suleiman, Arroyo y Cedric, con dos. También han visto portería Rubén Díez, Olaortua y Pepe Sánchez para hacer un total de 33. El 34 llegó en propia meta ante el Alcoyano. 34 goles que hacen que los isleños sean el segundo equipo más prolífero, sólo superado por el Castellón (40). También es el segundo menos goleado, con 13, un más que el Málaga, que es el que menos recibe.
En la última rueda de prensa del año, Guillermo Fernández Romo no ocultó la satisfacción de acabar el año así: «Por suerte, hemos ganado 12 partidos de 17 que nos hemos vestido juntos. Sólo ha habido un día que no hemos sacado un resultado positivo y eso es algo increíble. Hay muchas razones para estar contentos porque hay actitud, hay esfuerzo y hay rendimiento». «Estamos satisfechos, pero no podemos alardear. Hay que seguir manteniéndose en el equilibro y la moderación. Claro que tenemos felicidad, pero siempre reprimida porque sabemos que el 27 hay que volver a entrenar y el día 3 tenemos otro partido muy exigente», añadió.
2023 empezó con decepción, pero termina con ilusión y esperanza. El trabajo de los de Romo es incuestionable. Sólo el inesperado tropiezo ante el Inter City en Can Misses mancha una hoja inmaculada. Pero como se suele decir, hasta el mejor escríbano echa un borrón.
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